El delantero catalán ha sido muy admirado en dos clubes que el próximo fin de semana se verán las caras en el estadio Benito Villamarín. Real Betis Balompié y Real Club Deportivo Español de Barcelona. Sergio García de la Fuentes ha calado en las aficiones de ambos clubes. Más lo hizo en la afición perica, donde actualmente vive su segunda etapa. Su vuelta al club blanquiazul no está siendo tan exitosa como su primera etapa.
Antes de llegar al Real Betis
Sergio García se formó como futbolista en las categorías inferiores del Fútbol Club Barcelona. Con este club llegó a debutar en la Primera División española de la mano de Frank Rijkaard en un partido frente al Sevilla Fútbol Club el dos de septiembre de 2003.
En la temporada siguiente, la 2004/2005, se marchó cedido al Levante Unión Deportiva en busca de minutos que le permitiesen formarse como jugador. Allí, vestido de granota, sumó un total de 31partidos en los que consiguió siete goles.
Tras eso, se marchó como jugador traspasado al Real Zaragoza en la campaña 2005/2006. En La Romareda consiguió anotar 15 goles en liga en un total de noventa partidos en liga. Con el conjunto aragonés descendió en la Segunda División española en su última temporada en la ciudad maña.
Dos años en tierras andaluzas
Tras ese descenso, firmó con el Real Betis Balompié en el verano de 2008. Justo ese verano, el delantero catalán se proclamó campeón de Europa con la Selección española de Luis Aragonés. En esa Eurocopa solo sumó los noventa minutos del partido frente a Grecia de la primera fase.
En su primera campaña en la ciudad de Sevilla, la 2008/2009, jugó veintiocho partidos en Primera División y sumó diez goles. Volvió a vivir la historia del descenso; esta vez en el Manuel Ruiz de Lopera.
A pesar del descenso, el delantero siguió en la disciplina bética en Segunda División. En esta categoría sumó doce goles, con los que se despidió de la entidad verdiblanca. Estos serían sus últimos números con la camiseta de las Trece Barras.
RCD Espanyol, su mejor época
Se había formado en el equipo contrario. Era del rival. Aun así, llegó a Barcelona de vuelta para ganarse el cariño de la afición del Real Club Deportivo Español de Barcelona. Con trabajo, esfuerzo y, sobretodo, goles. Cinco temporadas jugó el delantero español como blanquiazul, desde la 2010/2011 hasta la 2014/2015.
Allí pronto se convirtió en ídolo, en referencia perica. Los goles se le encomendaban a él. Los partidos los capitaneaba él. Cinco temporadas que le dieron para mucho, hasta el punto de que se puede decir que es su mejor época deportiva, ya que logró combinar estabilidad y resultados positivos. En esas cinco campañas, anotó 41 goles solo en liga.
A Catar por una temporada
El fútbol empezó a cambiar. El dinero empezó a liderar el movimiento de los jugadores. El club catarí Al-Rayyan le ofreció un contrato con una gran cantidad económica y se marchó del Espanyol.
En Catar logró mucho protagonismo. Dado que es una liga que está creciendo, sobretodo a base de dinero, el hecho de fichar a un jugador español, campeón de Europa y pupilo del mejor entrenador de la historia de España, Luis Aragonés.
Una temporada en tierras cataríes le bastó para sumar 16goles. Esto también ayudó a que la afición del conjunto cataría viese en él a su nuevo ídolo, aunque les complacería por poco tiempo.
Vuelta al Espanyol
En la campaña en la que nos encontramos, la 2017/2018, Sergio García cumple su segunda temporada en el Espanyol desde su vuelta de Catar. Los resultados que está teniendo el delantero campeón de Europa no están siendo los mismos que en su primera época.
Su papel actual en el equipo de Quique Flores es secundario. El estado de forma de Leo Baptistao y, sobretodo, de Gerard Moreno, hacen que el jugador cumpla el papel de suplente. Los partidos que juega los hace saliendo desde el banquillo. Esta temporada solo lleva un gol en liga.