Resultado inservible para ambos

La Unión Deportiva San Sebastián de los Reyes ha empatado a uno contra el Real Madrid Castilla Club de fútbol, en un partido que será recordado por los veinte primeros minutos de juego con un Sanse alegre con la pelota y un primer tramo de la segunda parte con un Castilla más dominante. Julio Algar ponía varias novedades respecto a la semana pasada. Morales en portería, Nandi, Maganto, como falso “9” y Carlitos eran titulares después de varias semanas.

Control sansero de más a menos

El partido comenzaba con una declaración de intenciones de los dos equipos. Se sabía por el juego qué conjunto se jugaba entrar en la próxima Copa del Rey y cual tenía los deberes de la permanencia casi finiquitados. Así, el Sanse se quedaba con el balón en contra de un Castilla que tampoco tenía serias intenciones de quitárselo. Por tanto, las primeras opciones serían sanseras.

En el minuto 5 Fer Ruíz hacía una jugada personal por la banda derecha para meterse en el área y tirar flojo. Una acción que era un fiel reflejo de la mínima tensión competitiva de los madridistas para robar. A la siguiente llegaba el tanto. Un centre de Borja Díaz, tras un resbalón de su defensor le llegaba a Carlitos, que libre de marca en la línea de gol anotaba el 1-0 en el minuto 6. Eficacia de los locales Vs pasividad visitante. Una combinación perfecta para los intereses de los de Julio Algar.

Tras el tanto, nada se modificaba a corto plazo. El Sanse seguía con el monólogo, aunque es cierto que el Castillla empezó a desperezarse tímidamente. Su momento llegaría con un movimiento táctico al borde de la media hora de juego. El central León, que estaba jugando de mediocentro, se puso en su sitio y todo comenzó a fluir, al dar más libertad en la medular a los medios sanseros.

En este contexto, los merengues tuvieron el 1-1 con una jugada individual del extremo Franchu que acababa con un disparo en la frontal que paraba Morales. Él estaba siendo el jugador más móvil de los suyos. El último tramo del primer acto era del Castilla ya tenían el esférico. Sin embargo, no aparecían las finalizaciones evidentes.

El Sanse había dado un paso atrás, dando la sensación de que necesitaban el descanso para reorganizar las ideas. En eso aprovecharon las acciones aisladas. Saúl tuvo un lanzamiento de volea fuera del área que paraba Luca Zidane y Maganto, en la última antes del pitido del árbitro para ir a vestuarios, pudo poner el segundo tanto con una falta directa que se fue fuera por poco. Los locales fueron de más a menos, todo lo contrario que el filial madridista, que ya estaba en el partido, pese a su falta de pólvora. Estaba claro que el 1-0 no iba a ser definitivo.

Empate y poco más

Tras el paso por vestuarios, el choque entró en una dinámica de tedio. Demasiada táctica para parar al rival, más que atrevimiento. La posesión no estaba clara, pero el Sanse se empezó a desenvolver mejor en eso. Maganto tuvo la primera de la segunda parte con un remate fuera, tras un córner. Fue la primera y única ocasión de los de Algar entre los tres palos.

El resto fue para el Real Madrid Castilla, que no estaba notando el haber jugado el pasado miércoles. De hecho parecía, debido al bajón físico, que eran los de Matapiñonera los que estaban más cansados. Así, los blancos (este domindo de negro) lograron el empate. Primero Quezada avisaba con una falta desde la izquierda directa, que tuvo que atajar Carlos Morales.

A la siguiente no fallarían. Córner a favor, peinada de León y el recién entrado Cristo libre de marca cabeceaba en el área pequeña hacia la red. 1-1 en el minuto 63. Justo observando los méritos de los de Solari. Hasta aquí el fútbol. El resto fue una evidencia de no poder del Sanse, debido a un físico ya desgastado y un conformismo incomprensible del Castilla.

Los del norte de Madrid movieron el árbol para ver si caía alguna manzana sin suerte. Primero entraba Mendi, un delantero. Con ello la idea de “falso 9” con Maganto arriba quedaba anulada. Después entraba el otro delantero de la plantilla, Castel, aunque fue una táctica ineficaz.

El 4-4-2 del Sanse ya estaba servido en los últimos quince minutos en juego.  Dos delanteros que se supone tendrían que dar mayor ofensividad a un conjunto que estaba lejos de la victoria. Por el contrario, la táctica fue estéril. Nada se movería en un desenlace de partido previsible. Los dos equipos habían dado ya todo lo que tenían. En el caso del Sanse la gasolina le duró los primeros veinte minutos y en el Castilla hasta el empate a uno. Un punto para cada uno, aunque ninguno se iba contento por su posición en la tabla. 

Con este resultado, el Sanse se queda con 51 puntos y se queda a dos del Talavera, equipo que marca el último puesto de acceso directo a la próxima Copa del Rey. Suma cuatro jornadas sin ganar, aunque nueve sin perder en casa .

La semana que viene se medirá al Rayo Majadahonda, en el Cerro del Espino. El filial madridista, por su parte, se queda  con 49 puntos y se queda en zona media de la tabla sin ya nada que pelear por arriba y abajo. Su próxima meta será ganar en Valdebebas al Racing de Ferrol.

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