Después de cinco temporadas sin un rumbo fijo, el Real Betis ha conseguido volver a disputar competiciones europeas. Lo hizo ante el Málaga, equipo que disputará LaLiga 1|2|3 el próximo curso pero que puso las cosas muy difíciles al Betis en el feudo verdiblanco. 3 puntos y una fiesta que se prolongará hasta el principio de la temporada 18/19.

Fin a una racha

Aunque el partido comenzó torciéndose. En-Nesyri hizo el 0-1, provocando el final de una gran racha que el Betis arrastraba desde el 17 de marzo (jornada 29). Esa fecha supuso el inicio de uno de los mejores momentos del equipo helipolitano donde no encajó ningún gol hasta que el delantero marroquí del Málaga vio puerta en el Benito Villamarín.

Pese a ello, el partido acabó decantándose del lado local con los goles de Durmisi y Fabián. Una rápida respuesta que denota la ambición del equipo por querer defender el quinto puesto y seguir matemáticamente vivos en la puesta por la cuarta plaza.

Fabián lideró

La figura del partido no tuvo otro nombre que Fabián Ruiz. El canterano bético demostró una vez más el porqué es titular indiscutible. Volvió a brillar en la sala de máquinas y cuando más atascado estaba el equipo, soltó un zurdazo desde el balcón del área para clasificar matemáticamente a su equipo para Europa. Se echó el equipo a la espalda y una noche más, se ganó el calor del público.

Premio a la afición

La victoria tuvo presente al jugador número doce. Muchos años han estado detrás del equipo y al finalizar el choque ante el Málaga, a la hora de disfrutar, no se privaron de hacerlo. Un reconocido mérito para aquellos que no están en el verde pero que no fallan en cada temporada y en cada partido cuyo sentimiento pudo reflejarse en las lágrimas de Quique Setién.