El próximo partido que disputará el Lugo lo hará con la sensación de tener el trabajo hecho. Los de Francisco, que vienen de vencer al Sevilla Atlético, consiguieron con esos tres puntos certificar la permanencia.
Por otro lado, la Cultural Leonesa dirigida por Rubén de la Barrera, parece haber conseguido despertar por necesidad. Los leoneses, que hace poco más de un mes tonteaban de forma peligrosa con el descenso, se encuentran en la actualidad en una cómoda decimoquinta plaza, a cinco puntos del Córdoba, el primero de los equipos en puestos de descenso.
Rubén de la Barrera, que llegó a estar señalado por los malos resultados de su equipo, ha sido capaz de revertir la situación, pues la Cultural depende de sí misma para mantenerse en la categoría a falta de cuatro jornadas para el final. Invicta en sus últimos cinco encuentros, la Cultural ha sobreponerse y dar un paso al frente con el objetivo final de la salvación.
Experiencia del técnico
Pese a que De la Barrera es el técnico más joven, ya no sólo de la categoría, sino del fútbol profesional español (33), el coruñés cuenta a sus espaldas con una amplia experiencia en el fútbol nacional. Conocedor de muchas de las categorías del balompié español, De la Barrera comenzó su andadura en los banquillos en 2006 en el Atlético Arteixo, superando por poco la veintena. Posteriormente pasó por el Montañeros, el Villaralbo y el CD Guijuelo en dos ocasiones, pasando entre medias un año por el Valladolid B.
En 2016 llamaría a su puerta la Cultural y Deportiva Leonesa, por aquel entonces en Segunda B categoría en la que ya había dirigido con Guijuelo y Valladolid B, consiguiendo el ascenso a Segunda en su primera campaña y proclamándose campeón absoluto de la división al vencer al Lorca en la ruta de los campeones de grupos.
Tras el ascenso, el técnico sería ratificado tras su gran trabajo al frente del equipo y debutaría esta misma campaña en la división de plata. Cuestionado en ocasiones, lo cierto es que el coruñés ha sabido sacar las castañas del fuego y mantener su puesto a base de trabajo y resultados.
Planteamiento y cambios en el equipo
Habitual del 4-2-3-1, el técnico no ha dudado en cambiar tampoco de formación cuando así lo ha visto necesario. Sin ir más lejos, en los últimos tres encuentros ha optado por variar al 4-3-3, llegando a utilizar a lo largo de la temporada también el 4-4-2 o el 4-3-2-1. Con los dos primeros sistemas son con los que mejores resultados están cosechando en este sprint final de temporada, por lo que se espera que uno de ellos sea el elegido para enfrentarse al Lugo. En las últimas jornadas, Rubén de la Barrera a optado por un fútbol de ataque directo, subiendo la línea de presión y la intensidad, siendo parte de las claves en la mejora de los castellanoleoneses.