El Sevilla ha destituido a Pablo Machín Díez, el que hasta hace escasas horas era entrenador de un conjunto hispalense que ha visto con el paso de los meses cómo se ha ido enturbiando su temporada. En especial con la eliminación humillante en la Copa del Rey a cargo del FC Barcelona y con el descalabro a última hora en Praga que ha supuesto que los sevillistas se queden sin su competición.
Como ya sucediese el pasado curso, Joaquín Caparrós, director de fútbol de la entidad, ha sido el elegido para sacar al equipo de esta lúgubre situación. Hay que recordar que el Sevilla está sexto en LaLiga a cinco de los puestos Champions y sin LaCopa ni la Europa League, por lo tanto el reto para el utrerano y su cuerpo técnico -compuesto entre otros por Paco Gallardo y Marchena- es aún mayor, puesto que hay que salvar como sea el año, y eso pasa por jugar la Champions el año que viene. Un reto que echa a rodar este próximo domingo 17 de marzo con la visita del equipo al RCD Stadium, donde mora el RCD Espanyol.
Para aclarar todos los detalles y cualquier tipo de dudas que haya podido suscitar este severo movimiento, el club ofrecerá una rueda de prensa a partir de las 14:45 horas en el Ramón Sánchez-Pizjuán con el actual presidente de la entidad, José Castro, y el nuevo entrenador, Caparrós, a la cabeza.
Machín llegó al Sevilla el pasado verano tras una turbulenta campaña 2017-2018. Desde su anuncio, la ilusión cautivó al sevillismo, que era consciente del magnífico trabajo que el técnico de Soria había hecho en Girona, en donde se quedó a las puertas de la UEFA Europa League. Sin embargo, tras 50 partidos -con 26 victorias, 9 empates y 15 derrotas- al frente de la banca nervionense, la entidad opta por deshacerse de sus servicios dados los malos y recientes resultados cosechados que dejan al Sevilla con la temporada 2018-19 casi finiquitada y con pocas opciones de meterse en Champions.