Quedan apenas 24 horas para que Betis y Levante se vean las caras una temporada más. Esta vez el escenario sobre el que se enfrentarán es el Benito Villamarín, donde los verdiblancos, a pesar de ser un partido que se celebrará un martes a las 20:00 horas, contarán con una afición fiel y que les llevará en volandas a una victoria que daría a la hinchada una mayor tranquilidad.
Rubi se ha mostrado autocrítico antes de recibir al Levante
Rubi, como es habitual antes de cada partido, ha atendido a los medios de comunicación. Siendo fiel a su sinceridad, ha confesado con contundencia: "En el apartado general me gustaría poder controlar mucho más los partidos", aseguró el ex del Espanyol, quien desearía que el Betis llevase más la batuta y el ritmo del juego en cada compromiso.
Aunque en muchas ocasiones lo fácil es echar la culpa a los jugadores, o incluso al propio técnico, Rubi también ha aludido a los factores externos que pueden condicionar los partidos. Circunstancias que no desmerecen para nada el trabajo de los rivales: "No hemos llevado el control en otras ocasiones por circunstancias, unas de expulsiones y otras porque no hemos estado bien, o también porque el rival ha hecho muchas cosas bien."
Ante este problema de no ser capaces de llevar la batuta en los partidos, Rubi ha hablado con sus jugadores, como ha confesado en sala de prensa, y ha propuesto una meta al equipo. Precisamente para obtener buenos resultados que materialicen las sensaciones que los verdiblancos han mostrado por momentos, es necesario que el Betis sea capaz de controlar cada encuentro, y es un objetivo que el técnico ha planteado a sus pupilos para cumplirlo en un no muy largo espacio de tiempo: "Nos está costando controlar los partidos, y este es uno de los objetivos que le he planteado al equipo a corto/medio plazo", finalizó.