El reencuentro agridulce de Sergio León y el Benito Villamarín

El delantero volvió a la que fue su casa en las últimas temporadas antes de iniciar una nueva etapa en su carrera deportiva en el Levante. 

El reencuentro agridulce de Sergio León y el Benito Villamarín
Sergio León en un partido siendo jugador del Betis ! Foto: LaLiga Santander
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Por Fatima Juan Belmonte

El encuentro que vivió el Benito Villamarín ante el Levante fue para recordar. Después de que el conjunto verdiblanco comenzara perdiendo desde el comienzo del partido, supieron cómo remontar el marcador y terminar el choque con 3-1 en electrónico y conseguir sumar los tres puntos de la victoria tras los dos goles de Loren y el de Borja Iglesias, destacando la gran intervención de Joaquín, puesto que fue el autor de las asistencias y uno de los protagonistas. 

No obstante, cabe destacar que Sergio León volvió al Benito Villamarín para hacer frente a un encuentro, pero en este caso no defendiendo la camiseta de las trece barras, sino siendo jugador del rival del conjunto verdiblanco. El delantero regresó con las emociones a flor de piel, a pesar de tener que verse las caras con el que fue su equipo, después de su incorporación a la cantera bética con 15 años. A lo largo de su carrera ha pasado por varios clubes y regresó en la temporada 2017/2018, pero en este último mercado de verano puso rumbo al Levante. 

Un encuentro en el que salió como titular y luchó por encajar el balón entre los tres palos de la portería de Joel Robles, pero no logró anotar ningún tanto en el choque, puesto que hizo frente a un guardameta que cada vez se vio más seguro y ante un Betis que cada vez se crecía más encima del terreno de juego. Tuvo buenas intervenciones y participaciones para marcar la diferencia en el partido, pero el que fuera su equipo hace unos meses se impuso de tal manera que dio la vuelta al marcador.

En el minuto 64 salió del terreno de juego y entró Borja Mayoral para sustituirle en lo que quedaba de encuentro. Un momento especial el que se vivió, porque la afición verdiblanca se levantó para aplaudirle mientras que abandonaba el verde. Un reencuentro bonito, pero a la vez agridulce para el delantero.