Todo entrenador desea siempre tener un jugador que entra desde el banquillo y revoluciona el partido, que lo cambia por completo. Suele contar siempre con el agrado del técnico y contar con muchos minutos a lo largo de toda la temporada. A este futbolista dentro del “mundillo” del fútbol se le denomina “revulsivo”. Lo era Henrik Larsson en el Barcelona, Pedrito cuando tenía a la MSN delante, Ángel Correa en el actual Atlético de Madrid y parece que Borja Galán también lo es en este nuevo Dépor en Segunda División B.

Lo cierto es que su papel como agitador de partidos viene condicionado por la lesión que le impidió hacer pretemporada y estar a tono para el arranque de la competición. Por eso, Borja Galán aprovechó todos los minutos que le dio Fernando Vázquez en los cuatro primeros partidos para ponerse en forma físicamente y demostrar que tiene hueco en el once inicial. Perjudicado por la llegada de Lara desde tierras andaluzas, que se antoja clave para el esquema blanquiazul, y la permanencia de Keko Gontán en el club, hacen que el madrileño tenga que volver a demostrar que sí puede formar parte de la primera plantilla y ser una pieza fundamental para conseguir el ascenso a final de temporada, tras dos años de cesión en Alcorcón y Racing de Santander.

Ambicioso y con ganas

A pesar de haber disputado sólo 61 minutos en total y no ser titular en ningún partido, sus actuaciones han sido muy buenas y han servido para desatascar el ataque de un Dépor al que le cuesta generar ocasiones de peligro con el balón en movimiento. Consciente de su situación y rol actual en el equipo, admitió el pasado miércoles en rueda de prensa que “no me haría ningún bien catalogarme a mí mismo como revulsivo. Soy ambicioso y creo que puedo hacer ese trabajo desde el principio y mantenerlo”.

Tras el partido ante el Coruxo, Fernando Vázquez dijo que era el “momento de tomar decisiones” y tras la buena actuación de Borja Galán, el atacante madrileño espera ansioso que le llegue su momento de titularidad y demostrar que es capaz de rendir desde el minuto cero de partido.