Quinientos setenta y cuatro días tuvieron que pasar para que el Metropolitano volviera a rugir, sin embargo, la espera llegó a su fin y las gradas del fortín rojiblanco volvieron a llenarse, disfrutando de la presencia de toda la hinchada colchonera y lo hizo nada más y nada menos que ante el FC Barcelona, conjunto que buscó redimirse y conseguir la victoria, sin embargo, el Atlético de Madrid se convertiría en una aplanadora y lograría asestar un duro golpe a la moral culé.
-
Brillante primer tiempo
Desde el inicio del encuentro la hinchada rojiblanca ánimo al Atleti a buscar la victoria, a que defendiera cada pelota y dejara la vida en cada choque y así lo hizo debido a que cuando el Barcelona buscaba aprovechar las contras y crear peligro en el área de Oblak, siempre encontraban bien posicionados a la defensa colchonera, no solo eso, ya que el conjunto rojiblanco tuvo la primera clara del partido tras una contra y diagonal de Lemar que se marchó por muy poco a un lado del arco rival, pero tras esa jugada, el Atlético de Madrid buscó anotar el primero del choque y darle una alegría a su gente.
Transcurrido el primer cuatro de hora del enfrentamiento, el conjunto culé trataba de encerrar en su propio campo al Atleti mientras que el equipo rojiblanco se mostró más directo y aprovechaba la velocidad de Joao, Lemar y Carrasco para crear acciones ofensivas, siendo el Atlético de Madrid el que estuvo más cerca del primero tras el caño y remate de Joao o el tiro libre de Carrasco que rozó el travesaño, sin embargo, el Barça también tuvo sus ocasiones, pero el que consiguió abrir el marcador fue el conjunto que va de rojo y blanco tras un gran control de Joao, pase de Suárez y definición magistral de Lemar.
Tras el gol colchonero, el conjunto culé casi anota el empate, pero el remate de Coutinho se marchó a un lado del arco, sin embargo, a la contra Suárez tuvo el segundo de la noche, pero su bombazo se fue, por muy poco, a un lado del travesaño, perdiéndose la ocasión de anotarle a su ex equipo.
En los siguientes minutos del encuentro, el Barcelona salió a presionar alto y llegaba con mayor asiduidad al área de Oblak, pero en cada ocasión, tanto el portero como la defensa rojiblanca atajaron y rechazaron el balón sin problemas, por el contrario, el Atleti buscaba encontrar mal parado al rival y pegar de primera y lo consiguió al final del primer tiempo tras una contra de Lemar y un golazo de Luis Suárez, demostrando que este equipo lucha cada balón como si su vida dependería de ello.
-
Gran segundo tiempo
En la segunda parte del encuentro, el Atlético salió con una intensidad muy alta y buscó el tercero de la noche por todos los medios, por el contrario, el Barça trató de achicar la diferencia y tuvo algunas situaciones para anotar, no obstante, como en el primer tiempo, el de las situaciones más claras fue el Atleti, pero el Barcelona tuvo el empate en las botas de Coutinho, sin embargo, el culé se encontró con el mejor arquero del mundo, Jan Oblak, portero que atajó el balón sin inconvenientes.
A falta de media hora para el final, la tónica del encuentro se mantuvo, con un Barcelona que trataba de encerrar al Atlético y un conjunto colchonero que buscaba aprovechar las contras y casi consigue el premio mayor al minuto 65 tras una contra de João y Suárez que finalizó el portugués, pero su remate lo atajó Ter Stegen, no obstante, el Atleti no claudicaría ni bajaría los brazos y siguió con hambre de gol.
A falta de veinte minutos para la final, entraron Ángel Correa y Antoine Griezmann como recambio de Luis Suárez y Joao Félix y casi consiguen anotar el tercero tras una contra del francés y pase al argentino, pero el balón se marchó muy pasado, sin embargo, en los minutos siguientes, el Atleti siguió insistiendo a través de las contras.
En los minutos finales y cuando más lo necesita el equipo, la hinchada rojiblanca consiguió traer a la memoria al Vicente Calderón y dejó la garganta en cada cántico en apoyo al Atleti y el conjunto colchonero respondió, ya que con más corazón que piernas luchaba cada pelota, logrando derrotar el FC Barcelona.
De esta manera el Atlético de Madrid dio un golpe sobre la mesa, demostró que está para ganarle a cualquier equipo y porque no, volver a salir campeones.