Juan Carlos Unzué, técnico del RC Celta de Vigo, salió este viernes a rueda de prensa con motivo del partido de este sábado ante el Eibar. Tras tres jornadas sin conocer la victoria el técnico celeste espera poder reengancharse a las posiciones europeas de la tabla. Posiciones en la que espera estar a final de temporada pero de las que dijo que no sería un fracaso no llegar a ellas, solo una decepción. Un planteamiento algo conformista que no ha gustado mucho a la afición viguesa, tras jugar la pasada temporada la UEFA Europa League y de las palabras de Aspas esta misma semana donde aseguraba que él si quería volver a las competiciones intercontinentales con el Celta.

Derrota en Getafe

Al técnico le preguntaron por lo sucedido la pasada jornada en el Alfonso Pérez, siendo muy crítico con la actitud del equipo. Hizo hincapié en lo sucedido fundamentalmente en la segunda parte, “Vi al equipo sin creer en que podíamos remontar, sin la capacidad de competir hasta el último minuto. Lo hemos hablado y las sensaciones de los jugadores fueron parecidas. Cuando uno encaja tres goles, que son muchos para un partido, uno puede pensar que ha defendido muy mal, pero para mí dos de los tres goles están relacionados con que no hemos atacado bien”. Una derrota dura que aleja al Celta de la séptima plaza, tras perder también la jornada anterior en Mendizorroza ante el Alavés.

Partido importante frente al Eibar

El técnico navarro habló de la importancia que tenía el partido y de cómo ve a su rival. En la primera vuelta, el equipo pasó por encima a un Éibar desconocido pese a llegar en buena racha de resultado, pero el encuentro de este sábado será diferente. Habló de las claves que pueden decantar el partido y los puntos en los que había centrado los entrenamientos esta semana, “Tengo muy claro el tipo de partido que vamos a tener mañana. La propuesta de Mendilibar es agresiva independientemente del rival. Siempre intenta quitarte el balón lo más rápido posible y atacarte rápido. A su vez, nosotros también podemos hacer daño con ese tipo de partido”.

El Celta se juega mucho esta jornada. Se esperaba que frente a Alavés, Getafe, Éibar, Girona y Las Palmas, el conjunto celeste diera un empujón a sus aspiraciones. Pero de momento el balance es negativo, con tan solo un punto de seis posibles. Y dando la imagen de un equipo apático y conformista, sin la garra que le caracterizó en la primera vuelta.

Posibles cambios en el once

Tras dos jornadas en los que ha habido sorpresas en el once, ante el Éibar puede volver a haber rotaciones. Con un calendario lleno de partidos en poco tiempo, el técnico se plantea dar descanso a alguno de los jugadores que más minutos han disputado y dar la oportunidad a los suplentes. Cambios puntuales, ya que no quiere hacer ninguna revolución que pueda perjudicar el juego del equipo. Sobre esos cambios dijo, “Alguno voy a hacer porque tenemos dos partidos seguidos, pero no voy a hacer ninguna revolución. Creo que no sería lo correcto”.

Fuera de Europa ¿decepción o fracaso?

Al ver si su situación actual en la tabla, los periodistas le preguntaron si el quedar fuera de Europa esta temporada sería una decepción. Pero el navarro lo tiene claro. “Cada uno tiene su opinión personal, la de Iago es muy válida y la ha hecho saber. Yo no voy a entrar en si estoy o no de acuerdo. No me gusta adelantar acontecimientos de cosas que no han pasado. Si fuese hasta el día de hoy, viendo el rendimiento del equipo, para mí no sería un fracaso. Evidentemente estamos fuera de Europa, pero sería una decepción. Nuestro juego es para estar más arriba. No tengo ninguna duda de que vamos a estar en la pelea. Independientemente de lo que pase mañana, esto no se va a acabar. Hay mucha igualdad entre un grupo muy grande de equipos que estamos peleando por lo mismo. No va a ser fácil, pero tengo la absoluta seguridad de que vamos a competir por ese objetivo".

Palabras que dejan clara la opinión de Unzué, al cual se le puso como objetivo el llegar a Europa. Un objetivo que puede estar cercano por el juego del equipo en el aspecto goleador, pero con unos números en defensa que impiden estar más arriba.

La reacción no se puede hacer esperar. Los resultados no llegan y los rivales, que no fallan, se empiezan a distanciar. Tras una temporada casi sobresaliente con Berizzo, la parroquia celeste esperaba más de Unzué y de la plantilla que se le confeccionó.