La apisonadora parisina anuló la maquinaria azulgrana para noquear de forma contundente a una plantilla rota e irreconocible. El regreso ansiado de la máxima competición europea terminó por ansiar el pitido final de un encuentro con demasiados tintes para olvidar. Pese a la dolorosa derrota, al Barça aún le restan 90 minutos para igualar la machada gala. Nadie lo ha hecho nunca, ya que un 4-0 jamás se ha remontado en una eliminatoria a doble partido en toda la historia de las competiciones europeas. Sin embargo la gesta deberá servir de estímulo a los azulgranas para intentar, al menos, morir matando sobre el verde.
No fueron cuatro, pero sí tres. El FC Barcelona llegó a su primera final de la Liga de Campeones sellando el pase a golpe de remontada. La temporada 1985/1986 el equipo azulgrana claudicó en la ida de las semifinales ante el IFK Göteborg en el Gamla Ullevi. En la vuelta no hubo compasión alguna por los hombres de Terry Venables, capaces de devolver el tres a cero en el Camp Nou a los suecos y forzar la tanda de penaltis que cercioraba el pase a la final de los azulgranas dónde se medirían al Steaua de Bucarest. La fortuna, que se había aliado con el Barça en la semifinal, cayó en su contra en la final dónde los rumanos se alzarían como vencedores en el Sánchez Pizjuán.
Tampoco se salvó de la gesta el ‘Dream Team’. La temporada 1993/1994 el equipo de Johan Cruyyf se erguió sobre el Dinamo de Kiev para tumbar el tres a uno cosechado en la ida. El equipo catalán repitió el mismo resultado de la ida para empatar la eliminatoria, y de la mano de Ronald Koeman, a falta de 20 minutos para el final, decantaba la balanza a favor de los azulgranas. Con Louis Van Gaal, y con los cuartos de final como telón de fondo, el Barça también fue capaz de sobreponerse al estrepitoso tres a uno de la ida frente al Chelsea en Stamford Brigde la temporada 1999/2000. Los goles de Rivaldo, Dani García y Luis Figo, que habían neutralizado el de Tore André Flo para empatar la eliminatoria, terminaron con la rúbrica de Rivaldo y Patrick Kluivert, que no dejaron tiempo para los penaltis.
Más recientemente tampoco se escapan los Messi, Iniesta y compañía. El Barça ya remontó un resultado en los octavos de final. Lo hizo la temporada 2012/2013 tras cosechar un dos a cero en el Giuseppe Meazza frente al AC Milán obligando a los azulgranas a revestir el marcador en el Camp Nou. Pese a estrellarse contra el muro milanés en la ida, la vuelta terminó saldándose con un cuatro a cero para el Barça gracias al ‘doblete’ de Leo Messi y los goles de David Villa y Jordi Alba para poner rumbo a los cuartos de final.
Grandes gestas en la historia azulgrana que invitan a creer que al menos, intentarlo, es posible. El equipo más laureado de los últimos tiempos merece un mínimo de respeto y confianza para tratar de aspirar a levantar al respetable del Camp Nou en una noche con poco que perder y mucho por ganar.