En la Romareda llegaron los tan deseados debuts como titulares de Chuli y Álvaro Lemos. El Lugo saltó al verde con las mismas ganas de siempre, pero con distintos gladiadores. Francisco sorprendió con una propuesta que no desentonó, pero que tampoco dejó las mejores sensaciones.

Cristian Herrera fue titular en detrimento de Iriome, y el equipo notó la ausencia de su futbolista más desequilibrante. En el segundo acto, Campillo volvió al terreno de juego tras una larga travesía por la enfermería. Antes lo había hecho Iriome en sustitución de Lemos, momento en el que el preparador del cuadro rojiblanco decidió variar el sistema en busca de la remontada.

La disposición de tres centrales concentró a más efectivos en la zona de ataque, lo que propició que se generaran más ocasiones, pero en ambas porterías. El Zaragoza se defendió con todo y aprovechó las subidas del Lugo para intentar matar a la contra. El tanto de Buff de falta directa acabó con toda aspiración de un equipo que notó la presencia de las caras nuevas.

Líder en posesión, pero no en ocasiones

No es noticia que el Lugo mande en el dominio del esférico sobre su rival. Desde el ascenso a la categoría de plata, esa ha sido la seña de identidad propuesta por Setién y que ha visto su continuación con los nuevos entrenadores. Frente al conjunto maño no fue diferente, el cuadro lucense concentró un 54% de la posesión, por el 46% del Zaragoza. Los disparos, sin embargo, están a favor del equipo aragonés: 18 golpeos, de los que siete fueron a puerta, por los 14 y cuatro del Lugo.

La renta final fue de 2-0 para los locales, pero si Juan Carlos no hubiera detenido ese lanzamiento de penalti a Borja Iglesias en el tiempo de descuento, estaríamos ante la mayor derrota encajada por el conjunto albivermello en la presente campaña, un 3-0 en contra que igualaría el marcador en casa del Huesca.

Sorpresas en la convocatoria y fuera del play-off

Barco y Kravets se quedaron finalmente fuera de la lista. La vuelta de Luis Ruiz y la titularidad de Chuli, obligaron a Francisco a prescindir de ambos jugadores. El Lugo acaba la jornada en octava posición, empatado a puntos, eso sí, con el séptimo, el Numancia. Tanto el Zaragoza como el cuadro rojiblanco sabían los resultados de sus rivales directos antes de comenzar el choque, lo que aumentó la presión de un partido en el que no se repitió la remontada in extremis de la ida. Natxo González estudió bien al Lugo y contrarrestó su línea de tres media puntas con la presencia de más hombres en la medular, con lo que controló el partido y a penas pasó apuros.