Gerard Piqué salió en solitario en la rueda de prensa. Era momento de aclarar situaciones y de apaciguar ánimos negativos. El central barcelonista no tuvo pelos en la lengua en reconocer situaciones. El se queda, según ha reconocido, aparte de buscar la clasificación directa, dar la vuelta a los pitos que sufrió en el entrenamiento posterior al 1 de octubre.
Nada más entrar se ofreció a estar el tiempo que hiciera falta para contestar a todas las preguntas que se pudieran tener. Comenzó siendo cuestionado acerca de las sensaciones que tuvo en su vuelta a la selección. El catalán reconoció que el primer entrenamiento fue "difícil", y que quería solucionar el problema "dando la vuelta" a los pitos. "Mediante el respeto y la coherencia todo puede llegar a buen puerto" reconoció el '3' del Barcelona y la selección española.
No dudó en darle un mensaje a la afición, primero considerando que es imposible poner en duda su compromiso: "Llevo muchos aquí y considero esto una familia. Es una de las grandes razones por las que estoy aquí. Me duele que se haya dudado de mi compromiso. Estoy muy orgulloso de estar en la selección española. El mensaje es que no se dude de mi compromiso porque estoy muy orgulloso de estar aquí" finalizó en esa cuestión Piqué.
En la zona mixta del Camp Nou tuvo una serie de declaraciones que no fueron entendidas, y Piqué, en relación a ellas, remarcó que no se arrepiente porque dijo lo que sentía. "Es imposible que todos pensemos igual. Mediante el respeto y el diálogo nos podemos entender todos" consideró.
En el tema del independentismo consideró que "un independendista podría jugar en la selección", porque considera que no está en contra de España. "Quieren tener su propio país, solo eso". En cuanto a sí debería de dejar de hablar de política considera que ante todo son personas antes de futbolistas, tienen sus problemas familiares y personales.
En cuanto a una posible de retirada de la selección, comentó que quiere continuar con el equipo y la Federación, a los que considera como una familia. Una familia que entiende que estén cansados de la situación. Los periodistas consultaron sobre la situación con Sergio Ramos, dejando claro que ''la relación es fenomenal'', poniendo como ejemplo que serán ''socios de un negocio''.
Cuestionado sobre los tweets que escribe: "Las redes sociales son más frías. La gente lo interpreta de muchas maneras. Es difícil transmitir lo que está pasando en Cataluña si no estás allí. Yo he visto cosas muy distintas de lo que se ha podido percibir en la televisión. Comentar las cosas es bueno. Estamos en un punto que se está radicalizando todo. Cataluña es ahora como el hijo de 18 años que se quiere ir a casa. El Gobierno tiene dos opciones: o sentarse con el hijo y dialogar o no hacerlo y que el hijo se vaya'', aseguró el central.
Sobre un posible mensaje de Lopetegui y del vestuario, reconoció que no hubo ninguno. Dijo que se había hablado de todo lo que ha pasado pero no hubo ningún mensaje. Y en cuanto al mensaje del Rey: "No escuché el mensaje y no porque no me interesara. Estábamos jugando a la pocha y no lo pude escuchar", finalizó.