El Sevilla consigue algo más que tres puntos para seguir en la lucha después de vencer en un derbi en el que el Betis fue muy superior en la primera mitad. La reacción y cambios en el descanso permitieron que mediante el balón parado el equipo visitante se llevara el preciado botín que le aúpa al liderato.

El Betis ahoga y desubica al Sevilla

Ambos entrenadores alinearon onces muy ofensivos, con el fin de no especular y salir a por el partido. Quizá Sampaoli fue más atrevido con solo tres defensas puros, pero su intención le salió por la culata. El equipo de Víctor Sánchez del Amo ahogó y desubicó a un Sevilla recién levantado de la siesta. Desde el primer minuto se vio que el Betis tenía más ganas y durante la primera mitad fue ampliamente superior a su eterno rival. En temas de actitud y de fútbol; el equipo verdiblanco ganó la mayoría de balones divididos y generó mucho más peligro. Construyendo desde atrás, llegando por bandas y cruzando diagonales hacia el centro, la defensa sevillista se vio muy superada en unos 45 minutos donde el equipo rojiblanco estuvo muy partido. N’Zonzi no unió a las dos mitades del Sevilla debido a una gran presión del Betis sobre el francés. Nasri, Vitolo, Jovetic y, sobre todo, el Mudo Vázquez tuvieron una floja participación. Ceballos iluminó a su equipo, mostrándose omnipotente en la medular, y conduciendo para distribuir el juego a bandas. La defensa del Betis apenas tuvo que emplearse, la aparición más destacable fue la de Durmisi en el gol. En una de las múltiples acometidas sobre N’Zonzi, recuperó el cuadro local, el galo cometió una falta algo rigurosa que la envió Durmisi al fondo de las mallas de Rico; eso sí, después de que la barrera del Sevilla se partiera con suma y sorprendente facilidad. Lo mejor para los hombres de Sampaoli fue la llegada de un descanso que necesitaba tanto para reponer fuerzas físicas como mentales.

Cambio mental y futbolístico del Sevilla

Jorge Sampaoli no vio nada clara la pésima primera parte de su equipo y, ni corto ni perezoso, introdujo dos cambios que surgieron efecto instantáneo. Iborra aportó carácter, fuerza en el mediocampo y potencia aérea, y la entrada de Ben Yedder retrasó a Jovetic que mejoró y mucho a Vázquez. Apenas 10 minutos después de iniciarse, un centro de Nasri que remató Iborra permitió el rechace tras una gran parada de Adán que Mercado reventó en boca de gol. El tanto dio todavía más alas al Sevilla que se refrendó en su estilo y siguió tocando en busca del segundo. El Betis corría tras la circulación mágica de un Nasri iluminado y no conseguía reponerse del mazazo. Creyó más el Sevilla y, de nuevo a balón parado, consiguió adelantarse después de que peinara N’Zonzi en posición dudosa y definiera Iborra. Simbólico que el capitán que cambió con su casta y coraje el partido fuera quien diera finalmente los tres puntos al equipo visitante. El equipo de Víctor quedó tocado ya que justo antes de que se botara la falta el técnico verdiblanco había modificado el esquema en busca de un gol. La diana de Iborra trastocó todos los planes béticos que casi no merodeó el área de Rico, solo cuando se acercaba mediante el balón parado.

Victoria vital del Sevilla que dormirá empatado con el líder en una jornada que se antoja como positiva por los enfrentamientos entre Villarreal y Real Madrid y entre Atlético de Madrid y FC Barcelona. El triunfo en el derbi serán algo más de tres puntos, pues la moral que aportará esta remontada ante el eterno rival de la ciudad será enorme para el conjunto de Sampaoli.