El Gran Premio de Singapur no va a ser fácil para las flechas plateadas. Es un trazado donde el motor realmente no es tan necesario, quedando a un segundo plano. El chasis y los alerones son las partes más importantes a tener en cuenta si se desea tener un buen fin de semana.
Por ello, desde Mercedes están convencidos de que no será fácil. Toto Wolff, jefe deportivo de los de Brackley, ha declarado qué espera en tierras asiáticas.
“Identificar claramente nuestras fortalezas y debilidades ha sido una fortaleza en nuestro equipo en las temporadas más recientes. Mientras empujábamos para ser mejores y más fuertes en cada área, hemos metido el dedo en la llaga para entender la raíz de nuestros buenos y malos resultados".
"En 2015 Singapur fue una de las experiencias más dolorosas de las campañas más recientes, así que hemos aprendido de ello y pudimos volver con una gran victoria el año pasado. Éste es un circuito que hemos encontrado difícil para dominar por su combinación de curvas cortas, sus rectas relativamente cortas y su superficie bacheada. Vamos a Asia esta vez con la expectativa de que será un gran reto para nosotros".
"Hasta ahora este año, hemos visto el péndulo balancearse dependiendo del tipo de circuito. Singapur es el tipo de pista que debería favorecer a Ferrari y Red Bull. Ambos han demostrado rendimiento sólido en circuitos de baja velocidad, que piden máxima carga aerodinámica y nosotros lo hemos tenido más difícil en esos lugares en 2017".
Además, comenta haber aprendido de circuitos donde fueron dominados por Ferrari (véase Mónaco o Hungría). "A veces, características como éstas son simplemente el ADN del coche. Sin embargo, aprendimos mucho por lo que sufrimos en Mónaco, aumentamos nuestro nivel de rendimiento de manera significativa en Hungría y hemos progresado en entender lo que necesitamos hacer para sacar el máximo del chasis".
Por último, ha analizado el circuito de Marina Bay, al que describe como “un espectáculo único bajo los focos”.
"Singapur es un escaparate fantástico para nuestro deporte, un espectáculo único bajo los focos, pero es un fin de semana que les pide mucho a los equipos: las condiciones del ambiente hacen que estar en el garaje sea difícil, es un reto físico para los pilotos y para los coches en lo referente a gestión de frenos y de temperaturas de los neumáticos".
"Los coches de seguridad están casi garantizados, así que hay muchas variables que tener en cuenta en la estrategia. Es un fin de semana en el que cada parte del equipo necesita estar al máximo si se quiere conseguir un resultado fuerte. Vamos a hacerlo y a poner todas las piezas del puzzle juntas".