Hasta ahora el mejor resultado de Maverick Viñales en la temporada ha sido el segundo puesto en el Gran Premio de las Américas. Aun así, este año también está siendo una auténtica pesadilla en su parte del box del Movistar Yamaha. Lo peor, que todavía no encuentran la clave del problema, y llega un momento en que esto provoca desesperación, tanto como para el piloto como para su equipo.
“Al final del test pude ser rápido y logramos pasarlo bien"En su gran premio de casa tampoco pudo hacer más que una sexta plaza, aunque el catalán afirma que tenía “el mismo ritmo que Jorge y Marc, incluso estando solo en pista”. Por ello, los test post GP le han venido bien para intentar de nuevo encontrar de dónde vienen los problemas. “Hemos estado trabajando mucho con el tanque lleno, especialmente en las primeras seis vueltas, donde luché más. Creo que hemos mejorado mucho al final, por la tarde, y estoy contento con ello. Intenté sentarme más hacia atrás, porque pensé que podía pilotar mejor así, pero no continué porque molesta a la parte delantera”, explicó Viñales.
El piloto de Yamaha declara que en la frenada “no consigue que el neumático delantero funcione, que se coja al suelo o hundirlo para frenar”, aunque luego añadió “haber probado distintas configuraciones, y al final mejoró en ese aspecto”. “Creo que hicimos un buen trabajo hoy, pero sólo es un día de test, necesitamos probarlo durante la carrera. La moto está ahí, sólo tengo que hacer las primeras cinco vueltas con un buen ritmo”, dijo Maverick.
Algo importante también es cómo de rápido puede llegar a ser tras probar estos cambios. “Al final del test pude ser rápido y logramos pasarlo bien. Cuando configuré la moto más a mi gusto pude hacer 10 vueltas en 1’39 con el depósito lleno. Ese fue el ritmo de carrera, el ritmo para ganar. Hacía mucho calor en la pista y patinaba un poco, pero los tiempos estaban ahí”, finalizó el piloto español.