Daniel Ricciardo tuvo que abandonar en el Gran Premio de México por un nuevo fallo en su motor Renault, siendo el octavo abandono en lo que va de año. Tras bajarse de su Red Bull aseguró que odiaba su coche y que no quería participar en las dos carreras que quedan para terminar la temporada, reportando fallos desde la vuelta de formación, a pesar de haber conseguido la pole el día anterior.

Pasada una semana, el piloto australiano ha asegurado a través de un vídeo publicado en su cuenta de Instagram que solo necesitaba unos días para descansar. "Solo quería daros los buenos días y aclarar algunas cosas de México. Lo primero es que estaré en las dos últimas carreras, de eso se trata, no quiero otra cosa en mi vida", comenzó diciendo. También añadió que este año ha habido altibajos y eso ha sido frustrante, pero valora su trabajo a lo largo de la temporada y el de su equipo, por lo que asegura que se encuentra bien y que correrá en Brasil y Abu Dhabi.

Ante las palabras del australiano en México, se habló de la posibilidad de que Pierre Gasly, el piloto que ocupará su asiento la próxima temporada, pudiese subirse al monoplaza. Sin embargo, Christian Horner, jefe del equipo, reconoció que Ricciardo había tenido una carrera complicada. "Puedes entender su frustración, pero espero que estos nubarrones oscuros que le persiguen escampen en las dos últimas carreras", zanjó.