El conjunto de Billy Donovan llegaba al partido ante los 76ers en un mal momento anímico. Las últimas dos derrotas antes equipos más débiles como los Hawks o unos Lakers sin LeBron. Oklahoma necesitaba salir de esa mala racha aunque tuvieran un partido más que complicado por delante. Visitar Philadelphia no es uno de los mejores destinos cuando tienes que jugar de visitante. Por lo que tenían que sacar su mejor versión para competir contra grandes estrellas como Joel Embiid o Ben Simmons.

No se podían permitir  que se repitiera la mala actuación de la segunda unidad en el partido contra Los Ángeles. La temporada regular es el momento para corregir los errores. Ir acumulando malas sensaciones puede jugar una mala pasada en los Playoffs., algo en lo que son expertos en esta franquicia durante las últimas temporadas.

Los dos primeros cuartos del partido han sido sin un favorito claro. Cada uno de los equipos se impuso al otro por parciales parecidos en cada uno de ellos. Siendo un poco superiores los Thunder, pero con el encuentro muy abierto. Cosa que se mantuvo hasta que se acercaran los últimos minutos del partido y poco a poco los 76ers fueran ajustando el resultado. Con tres puntos por debajo, Joel Embiid, tirando de galones, asumió un tiro de el perímetro para empatar. Consiguiendo sacar tres tiros libres, los cuales anotó aún con un tiempo muerto en medio.

Con esa falta, quedaba fuera del partido Russell Westbrook, lo que le obligó a subir la última pelota al base suplente. Tras una pérdida que terminó finalizando Jimmy Butler, parecía que todo había quedado decidido a falta de menos de 10 segundos de que se pitara el final.

Lo que nadie se esperaba es que Paul George se vistiera de milagro en el tiempo que quedaba. Anotando un triple "at the buzzer", acompañado de una falta de Butler. El rumbo del encuentro cambió totalmente y la balanza se puso del lado de los Thunder de nuevo. La última jugada de los 76ers ha sido bastante confusa sin una idea clara. Algo que se vio influido por no tener tiempos muertos para pensar como afrontar esa posesión.

Un Ben Simmons que no penetró buscando el aro, un Butler indeciso en el tiro y una buena defensa, fueron los detonantes de que la victoria fuera para los visitantes por dos puntos, después de George anotara desde la personal para obligar a tirar de tres si querían no forzar una prorroga y ganar. Quizás haber buscado a J.J Redick para el tiro de tres o buscar la bandeja para el empate hubieran sido mejores opciones. Gracias a esto, OKC pone un registro de 5-5 en los últimos enfrentamientos.