Estamos inmersos en una constante revolución en la forma de jugar al baloncesto, y la NBA no es ajena a ello. Los Houston Rockets de Mike D’Antoni son el claro ejemplo de que el estilo y las formas están cambiando a pasos agigantados en este deporte. Su apuesta por un ‘small-ball’ extremo y el abuso del tiro de tres en cada encuentro, parecía tener resultados positivos para los tejanos basándose en la buena racha que cosecharon hace apenas unas semanas. Pero parece que esas buenas sensaciones se han esfumado de golpe, y ya son cuatro las derrotas consecutivas que atesora el conjunto de James Harden.
El haber perdido contra Los Angeles Clippers puede verse como algo normal, a pesar de la inferioridad que demostró Houston en ese partido, lo que no se explican los fans de los Rockets son los malos resultados contra los Knicks, Hornets y unos Orlando Magic que pasaron por encima de ellos en el último encuentro disputado.
Harden no está en un buen momento
Las causas que explican esta crisis están en el pobre porcentaje desde la línea de tres puntos, la gran baza ofensiva del equipo, y en el mal estado de forma de su gran estrella, James Harden. ‘La barba’ no llega últimamente a los números que nos tiene acostumbrados, y se encuentra muy errático en el tiro exterior, su gran especialidad. La estrella y MVP de la NBA ha declarado recientemente que no se siente nada cómodo en estos últimos encuentros, pero que no tiene ninguna duda que le darán la vuelta a la situación.
El mejor 'fichaje' es Westbrook
El mayor rayo de luz desde que los Rockets cambiaran su estilo de juego, no es otro que Russell Westbrook. El base de California está firmando unos números muy superiores a los que estaba mostrando en la primera parte de la temporada, haciendo jugar a sus compañeros y penetrando con mas asiduidad a canasta. Los grandes sellos de Russell a lo largo de su carrera, y los que le han hecho ser uno de los máximos estiletes de la liga durante muchos años.
Puede que esto solo sea un pequeño bache en la temporada de los Rockets, pero los rivales ya saben que hay muchas carencias en este nuevo estilo de Mike D’Antoni de cara a unos playoffs que se presentan interesantísimos.