Unicaja de Málaga se ha destapado como un equipo incapaz de hacer frente a los contratiempos que han atizado al cuadro costasoleño durante estos últimos meses. El conjunto dirigido por Luis Casimiro realizó un importante desembolso económico para apuntalar una plantilla excelsa con las llegadas de Darío Brizuela y Axel Bouteille; sin embargo, las lesiones y la incapacidad de respuesta en momentos clave han mermado las esperanzas de la hinchada verde. Como consecuencia, los malagueños fueron eliminados en la Fase de Grupos y pusieron fin a una temporada convulsa en la que llegaron a una final de Copa ACB que posteriormente perdieron ante un Real Madrid muy superior. Después de un sinfín de rumores que hablaban de un nuevo entrenador y tras las renovaciones de efectivos insignia como Carlos Suárez o Gal Mekel, Luis Casimiro seguirá al mando al contar con la confianza y apoyo de la directiva andaluza. 

Con la confianza del equipo y del vestuario y con el aliento de una hinchada constasoleña que siempre exige el máximo, Casimiro continuará en el banquillo del Carpena, al menos, hasta 2021. No obstante, el entrenador español cuenta con un 1+1, por lo que podría hacer efectiva su renovación por dos cursos dependiendo de objetivos y del desempeño del equipo el año que viene en un campeonato doméstico en el que los equipos de renombre ya han comenzado a sentar las bases de sus proyectos y plantillas. 

Con un Jaime Fernández todavía lesionado, el técnico de 60 años continuará contando con el talento y la experiencia de Gal Mekel, director de orquesta que ha ampliado su vínculo contractual con Unicaja hasta 2022. Por ello, Alberto Díaz, Mekel y el propio Jaime Fernández serán los encargados de llevar la batuta en la posición de '1' de un equipo que aspira a todo. Asimismo, Carlos Suárez seguirá portando el brazalete de capitán, lo que contribuye a que sea la extensión del entrenador sobre el parqué.