Marc Priestley ha sido uno de los ingenieros más queridos en McLaren. Llegó a Woking en el año 2000, un joven mecánico a prueba, que rápido ascendió a los altos cargos. El inglés estuvo en el equipo hasta 2009, siendo uno de los hombres clave en el campeonato de Lewis Hamilton en 2008. A día de hoy se dedica a comentar carreras de Fórmula 1 en medios de comunicación ingleses.

Priestley vivió en primera persona esa lucha entre Lewis Hamilton y Fernando Alonso en el año 2007. McLaren tenía el mejor coche de la parrilla, a un actual campeón del Mundo y un joven piloto que ya ha conseguido cuatro mundiales desde su llegada al Gran Circo hace once años, casi nada.

El británico concedió una entrevista al portal Drivetribe.com, donde dijo lo siguiente: “Yo estaba en el medio de todo esto. Es justo decir que ellos se odiaban el uno al otro al final de aquella temporada”, algo que se veía a simple vista.

“Ellos no trabajaban juntos para nada. Y cuando eso ocurrió los dos equipos de los dos coches estaban alrededor de aquellos pilotos, naturalmente dirigiéndose cada uno con su piloto y cerraban filas alrededor de su hombre, así que de esta forma se creó una enorme división en el equipo, como un muro en el garaje que separaba a ambos”, continuaba.

Todo esto tuvo una repercusión más que negativa en el equipo: “Esta separación del equipo fue la que provocó que no ganáramos el campeonato ese año porque estábamos distraídos en las peleas que teníamos internamente, lo que hizo que no nos centráramos en lo que estaba haciendo Ferrari y fue lo que hizo campeón en la última carrera a Kimi. Nosotros teníamos el mejor coche al final de aquel año, teníamos a los dos mejores pilotos en pista, estoy seguro, y sin embargo no nos llevamos nada”, argumentaba Priestley.

Algunos podrán defender una postura u otra, también los pilotos, depende de a quien le preguntes, te contará una versión u otra. Esto decía el ex de McLaren: “Pienso que cada piloto vería aquel año de forma totalmente distinta. Lewis en aquel momento contaba con la protección de McLaren y Ron Dennis. Él sabía que contaba con el apoyo de Ron y con el apoyo de los medios de comunicación ingleses mientras que Fernando, el Campeón del Mundo del anterior curso y considerado por todos como el mejor piloto del momento, estaba en un equipo inglés con un piloto inglés. Él estaba totalmente convencido de que Ron y todo el equipo apoyaba a Lewis. Algo que al principio ciertamente no era así”.

Por último, Priestley admite que también vio lo que Alonso percibía: “Finalmente, todos sabíamos que la relación estaba totalmente rota entre Fernando y el equipo y, en ese momento, creo que Ron realmente quería que Lewis ganara el título en la segunda mitad de temporada, y de esta forma se demostró que Fernando estaba en lo cierto, al menos en su propia mente”, comentó.