Los italianos empezaron con una presión asfixiante hacia su rival, dejándolo atónito y sin encontrar el balón para progresar en el campo de juego. El desconcierto de los holandeses, sumado a la lesión de Mazraoui (ingresó Sinkgraven) a los diez minutos del primer tiempo, reemplazante del argentino Nicolás Tagliafico, hacían parecer que los Bianconeri manejarían a su antojo el encuentro. A los 20 minutos, el Ajax se fue soltando de la marca férrea que le impusieron, se empezaron a encontrar De Jong y Van de Beek con los delanteros, obligando a los de Turín a retroceder y administrar mejor sus energías.

Con los dirigidos por Erik Ten Hag haciéndose dueños del partido, apareció la primera ocasión clara de gol, una gran triangulación entre el futuro mediocampista blaugrana, Frenkie De Jong, el brasileño, autor del gol en la ida, David Neres, y Dusan Tadic; el remate se desvía en Rugani, quedándole a Van de Beek, que intentó puntearla, pero pasó por encima del arco defendido por Szczesny.

“El comandante siempre presente”

El dominio absoluto de los De Gondenzonen (Hijos de los Dioses), no impidió a Cristiano Ronaldo marcar su gol, tras un gran tiro de esquina de Miralem Pjanic, a los 27 minutos. Este fue revisado por el VAR, tras observar la repetición y ver cómo Bonucci golpea intencionalmente a Schöne mientras caía, aun así, el árbitro Clément Turpin, convalidó el gol.

No pasó mucho tiempo para que el Ajax empatara el juego, por intermedio de Van de Beek, precisamente a los 33 minutos, Ziyech remató con su pierna menos hábil (derecha), se desvió en un defensor y quedaba solo el mediocampista para anotar su gol. La anotación no quedó exenta de polémica, por una supuesta posición adelantada, que luego de ser corroborada, se convalidó el tanto.

Este primer tiempo cumplió con todas las expectativas, dejando a los dos equipos empatados en el global y forzando un alargue.

Cambio radical

El comienzo de la segunda mitad mostró a una Juventus desganada, sin ideas de juego, abrumada por el excelente juego de su rival, un Cristiano Ronaldo sobre exigiéndose para alcanzar el segundo gol de los turineses, pero su equipo nunca lo acompañó. Otro dato de vital importancia es que el argentino Paulo Dybala no regresó al campo de juego debido a unas molestias y en su lugar ingresó Moise Kean.

Caso contrario fue el del Ajax, que salió con un gran ímpetu, idea clara de cómo dañar al contrario. El punto más alto de este equipo, fue sin duda el autor del primer tanto, Van de Beek, se mostró en todo momento como receptor de pases, distribuía juego y sobre todo pisaba área rival, siendo el gestor de un gran remate de media distancia que se colaba por el ángulo superior derecho del arquero contrario. En una ráfaga de los holandeses, Ziyech recibió el balón de De Jong, proveniente de un contragolpe, el delantero remató al primer palo y fue salvado de manera maravillosa por el portero local.

Transcurrían 67 minutos de juego, tiro de esquina a favor de Ajax, centro del danés Schöne, el central de 19 años, Matthijs de Ligt, ganó de cabeza frente a Rugani y Alex Sandro, decretando lo que sería la ventaja y resultado final del partido.

Llegando al final, el brasileño David Neres recibió de Ziyech e intentó rematar, pero su tiro no alcanzó el arco contrario.

Pocos pasos para la gloria eterna

Con un global de tres a dos en favor de Ajax, ha quedado claro que es un equipo que no debe subestimarse, y se hace fuerte de visitante, ya lo demostró en Madrid y ahora en Turín. Solo le resta esperar su rival de semifinales, que saldrá del ganador entre Manchester City y Tottenham.