La UEFA Europa League dio inicio a su ronda de 16vos de final, y luego de los grandes partidos que hubo en el primer turno, como el triunfo de la Roma sobre la Real Sociedad, o el empate 2-2 entre Arsenal y Sporting Lisboa, era el turno de Manchester United y Real Betis de animar la noche europea.
Los ‘Red Devils’ saltaban al campo de juego con la imperiosa necesidad de limpiar su imagen después de la humillación que sufrieron en el derbi ante Liverpool. Para ello, Erik ten Hag decidió alinear a los mismos once que cayeron en Anfield, para intentar reivindicarse con su gente en Old Trafford.
Del otro lado, el Real Betis, que volvía a Inglaterra casi 20 años después de su último duelo en esas tierras. En la temporada 2005/06, los beticos se midieron con Liverpool y Chelsea, igualando 1-1 con los ‘Reds’ y cayendo 4-0 frente a los ‘Blues’. Además, este compromiso marcaba un recuerdo más que especial para Joaquín, quien alcanzaba los 100 partidos en competiciones europeas con la camiseta del Betis.
Una rápida ventaja
Comenzaba el partido y no tardaría en golpear primero el Manchester United, con un rápido contragolpe que acabó con un remate a quemarropa de Marcus Rashford, el goleador de los ingleses en esta temporada. Lejos de conformarse, unos minutos más tarde volvía a avisar el local con el intento de Weghorst, que contuvo Bravo.
Todo era a pedir del Manchester United, que tuvo dos ocasiones más que claras en el cuarto de hora para aumentar su ventaja, pero no afinaba la puntería. El dominio de los locales era completo y el Betis solo se contentaba con mantener la diferencia de un solo gol en el marcador, ya que el balón pasaba de lado a lado sin apenas poder rozarlo.
Sin embargo, como el guion de una película, es sabido en el fútbol que los goles que pierdes en la portería rival, los acabas sufriendo en la propia. Así fue para el Manchester, que desperdició más de cuatro ocasiones claras de gol y el Betis, en una sola llegada, encontró el empate en los pies de Ayoze Pérez.
La última del primer tiempo fue para el Betis, con otro horror en la salida de David De Gea y un remate de Ayoze al poste. El árbitro señaló el final de la primera etapa y el Manchester se marchaba al descanso lamentando las chances desperdiciadas.
Un complemento diferente
Fuertes habrán sido los gritos de ten Hag regañando a sus dirigidos, porque el United salió más decidido al complemento y en solo unos minutos recuperó la ventaja. Antony recortó por derecha y envió el balón a dormir en la escuadra contraria de un Bravo que nada pudo hacer. Segundos más tarde, un centro de Luke Shaw encontraba a Bruno Fernandes y el portugués cabeceaba a gol para que subiera el 3-1 al marcador de Old Trafford.
De ahí en adelante, fue todo a pedir de los locales, con un control más holgado, tanto en el desarrollo del partido como en el resultado. En el mientras tanto, Bruno Fernandes recibía la cartulina amarilla por una dura infracción contra Bravo en un balón que quedó dividido entre el volante portugués y el portero chileno.
Las emociones no se detuvieron y llegó el 4-1 en los pies del que más se había sacrificado por su equipo: Weghorst. El neerlandés capturó un rebote en el borde del área chica y definió para reencontrarse con el gol, en medio de la lluvia de críticas que venía recibiendo por su desempeño, teniendo en cuenta la función que le otorga ten Hag.
Finalmente, el triunfo local quedó consumado y la revancha será el próximo jueves 16 de marzo, en el Benito Villamarín, donde el Betis se enfrentará a la difícil tarea de remontar el 4-1 en contra para seguir con vida en la UEFA Europa League.