El Milan se llevó el derbi della Madonnina contra todo pronóstico en un partido que tuvo absolutamente de todo. Sobre el papel, el Inter llegaba al encuentro como claro favorito, tercero en Serie A y con una buena dinámica de juego. Enfrente tenía al Milan de Gattuso, que se sitúa undécimo en la tabla y estaba sumido en una crisis tanto a nivel de resultados como a nivel institucional. Por si fuera poco, los rossoneri llegaban con bajas al partido, el portero titular del derbi fue Antonio Donnarumma, que actualmente es el tercer guardameta de la plantilla. Tras noventa minutos apasionantes, el marcador todavía reflejaba el 0-0 inicial, gracias a la labor de los porteros y del VAR. En la prórroga los astros se alinearon y el canterano Cutrone, de tan solo 19 años, marcó el gol de la victoria para su amado Milan. El pase a semifinales, donde espera la Lazio, es un soplo de aire fresco para Gattuso y el resto del equipo. Nadie habría podido prever las consecuencias devastadoras si el Inter hubiera salido vencedor en San Siro. Afortunadamente para el Milan, el fútbol es totalmente impredecible.
Los de Spalletti están obligados a cambiar el rumbo. El partido frente al Milan supone la tercera derrota consecutiva de los neroazzurri. Sin tener en cuenta el bochornoso empate contra el Pordenone en el Giuseppe Meazza. Tras caer eliminados en Coppa deben centrar todas sus energías en conquistar el Scudetto, ya que la Serie A es la única competición en la que todavía siguen vivos.
Gran arranque rossonero
El partido empezaba con contratiempos para Gattuso, que salió con un 4-3-3 en el que destacaba la presencia obligada de Antonio Donnarumma en la portería, debido a la lesión de su hermano y de Storari en el calentamiento. El portero que debutaba en la portería rossonera sorprendió a todos cuajando una gran actuación y manteniendo su portería a cero. Spalletti reservó de inicio a Borja Valero, que está siendo uno de sus jugadores más destacados esta temporada.
El Milan arrancó mejor el partido, protagonizando varias aproximaciones peligrosas y creando sensación de peligro en las inmediaciones de la meta defendida por Handanovič. Suso a banda cambiada comandaba todos los ataques del Milan, de sus botas se iniciaron las jugadas más peligrosas de esta primera mitad. Una de las más claras de los rossoneri la tuvo Bonaventura, pero su cabezazo se marchó alto. Los de Gattuso estaban realizando uno de sus mejores encuentros de la temporada.
El VAR fue decisivo
Cuando más cerca estaba el Milan del gol, se adelantó el Inter en el marcador. En primera instancia el gol de Donnarumma en propia puerta subió al marcador, pero tras revisar el VAR el tanto fue anulado. Se ve claramente que Ranocchia está en fuera de juego y aunque no llegue a tocar el balón, influye decisivamente en la jugada. El VAR salvó al Milan, a Gattuso y a Donnarumma. Ese gol pudo cambiar el desarrollo del encuentro por completo. Tras este gol anulado, el Milan perdió la iniciativa y el partido se descontroló. Las llegadas en ambas áreas se sucedían, pero ningún equipo consiguió adelantarse en el electrónico. Con esta tesitura se llegó al final de los primeros cuarenta y cinco minutos.
Ocasiones tras la reanudación
La segunda parte empezó como terminó la primera. El partido era un auténtico correcalles y cualquiera de los dos equipos podría haberse adelantado. Bonaventura, por parte del Milan, e Icardi, por la del Inter, estuvieron muy cerca del gol. Aun así, la más clara del partido hasta el momento la tuvo João Mário cuando se cumplía la primera hora de encuentro. Icardi le dejó un balón perfecto con la cabeza y el portugués con toda la portería a favor estrelló el balón contra Antonio Donnarumma. El italiano pasó de tercer portero a héroe. Antes de llegar al final de los noventa minutos reglamentarios tanto Milan como Inter tuvieron oportunidades para adelantarse en el marcador, pero no consiguieron aprovechar ninguna.
Cutrone decidió en la prórroga
El partido se iría al tiempo extra, en el que sin duda fue mejor el Milan de Gattuso. Durante la primera parte de la prórroga, los rossoneri llevaron peligro a la meta interista y al filo del descanso se adelantaron por fin en el marcador. Suso, que fue uno de los más destacados, filtró un pase preciso al corazón del área. Allí apareció el canterano Cutrone para mandar a la red el cuero. El delantero celebró el tanto con la grada eufórico. El Milán y Gattuso necesitaban una victoria con tintes épicos y estaban muy cerca de conseguirla. En la segunda mitad de la prórroga, el Inter lo intentó, aunque más con el corazón que con la cabeza. El Milan estuvo muy serio atrás y consiguió mantener la mínima renta a su favor.
El fútbol a veces tiene estas cosas. El equipo que llegaba inmerso en una grave crisis de identidad y resultados sale victorioso y reforzado, mientras que los favoritos suman tres derrotas en las tres últimas jornadas. Los de Gattuso buscarán seguir en esta línea ascendente frente a la Fiorentina en Serie A, mientras que el Inter recibirá a la Lazio en un duro partido que puede servir para alejar la crisis o para ahondarla.