El Real Betis se presentaba en el Sánchez Pizjuán con ganas de dar una alegría a sus aficionados, el equipo comenzó con una gran presión y con muchas ansias de poder llevarse el partido pero esto solo fue un espejismo. El Betis a medida que iban pasando los minutos se iba desfondando y se limitaba a dar la cara defendiendo, la calor tampoco ayudaba a los verdiblancos que poco a poco iban asfixiándose como el juego del equipo.

En la primera parte el conjunto dirigido por Merino apenas inquieto a la portería defendida por Sergio Rico, solo una contra llevada por Joaquín y Musonda creo algo de peligro pero sin apenas acierto. En la segunda parte el Sevilla salió con más ganas al césped, poco a poco el equipo bético iba echándose atrás mientras que los de Nervión se acercaban más al gol. En una contra llego el primero de los sevillistas, un centro desde la izquierda fue rematado por Gameiro que solo y a placer adelanto al Sevilla en el marcador, tanto Pezzella como Westermann defendieron muy mal una jugada que no debió ser gol. El Betis tuvo dos ocasiones de gol, por parte de Cejudo y Westermann pero no tuvieron suerte de cara al marco. Para acabar con el partido Coke mando un balón a la escuadra imposible para Adán, el lateral sevillista lanzo un misil imparable que acabo con todos los intentos del Betis por rascar algo de Nervión.

Novedad de Bruno en el lateral

Merino ante las bajas y los jugadores tocados que tuvo durante toda la semana decidió probar con Bruno como lateral derecho y pasando Montoya a la izquierda. Este experimento no le salió del todo mal al Betis ya que tanto Bruno como Montoya cuajaron en lo personal un buen partido. Cabe destacar que a pesar de estar sin laterales izquierdos Varela se quedó en el banquillo.

Muchas ganas pero poco fútbol

Los jugadores verdiblancos llevaban toda la semana preparando este choque con muchas ganas y  saltaron al terreno de juego con una gran actitud, presionando y buscando el balón desde el primer momento pero a la hora de jugar el equipo no da para más, solo algún desequilibrio de Joaquín y Musonda podría llevar peligro. Con Ceballos pegado a la izquierda pierde tanto el futbolista como el Betis, se ven limitadas sus características y no puede hacer su juego que debe estar en el medio y dando pases entre líneas. Otro problema es el de Rubén Castro, apenas un balón en 90 minutos tuvo el punta verdiblanco, por lo que es imposible que este destaque y participe.