Dicen que el hombre es el único animal capacitado para tropezar dos veces con la misma piedra. Extrapolado al mundo balompédico, se podría redefinir como que el Atlético de Madrid B es uno de esos equipos que pueden chocar contra el mismo obstáculo. En un mes de febrero que para nada se asimila en cuanto a resultados, ni tampoco en la frescura del juego, con el de enero, el filial del Atlético de Madrid vio cortada su racha invicta de diez jornadas consecutivas contra un serio CD Toledo (1-2), el mismo rival que puso punto y final el gran arranque firmado por los rojiblancos en la primera vuelta del campeonato doméstico.

El CD Toledo ha tomado oxígeno con una necesaria victoria a costa de un Atlético de Madrid B que regaló cortésmente cuarenta y cinco minutos. El primer cuarto de hora reveló a un cuadro local con falta de tensión, que no llegaba a tiempo a los balones divididos y que perdía en casi todas las ocasiones la segunda jugada. Ante esta falta de concentración, Sergio García se marchó en carrera en solitario de la defensa y Miguel San Román mandó a córner su disparo. Su actuación fue necesaria también escasos minutos después cuando sacó una mano prodigiosa a un balón envenenado despejado por Adrián Jiménez, otrora exjugador del cuadro toledano. Por este par de acciones – y, por qué no decirlo, por ser el mejor del equipo en los últimos dos meses -- sabe peor lo que la pelotita le deparó a la media hora de partido…

Ninguno de los diez jugadores de campo del Atlético B fue capaz de tener una muestra de compañerismo con Miguel San Román tras el accidentado gol encajado

El portero sacó de puerta, Adrián inició una jugada que cedió a Montoro. Sin opción de pase, el ex del Getafe reculó para apoyarse de nuevo en San Román para empezar de nuevo la construcción con la mala suerte que el balón pasó por debajo de su bota y se alojó en el fondo de las mallas para que el Toledo se adelantara en el marcador. Más allá de ser un error evitable tanto por la cesión atrás poco académica de Montoro como por el control y por una superficie castigada por el frío majariego, menos comprensible es que el guardameta natural de Benidorm no encontrara por parte de sus compañeros ningún gesto de cariño y de comprensión para transmitirle la confianza que necesitaba…

El accidente generó cierta intranquilidad en el cuadro madrileño, al contrario de un Toledo que, con cabeza e ímpetu, siguió lastimando a su rival. Hasta tal punto que, casi al filo del descanso, sacó brillo a la pizarra con una jugada que el filial tenía ensayada durante la semana para contrarrestar ese poderío aéreo. Jorge Ortí botó un saque de esquina desde la derecha, varios jugadores hicieron pantalla y prolongaron el cuero hasta el segundo palo donde aparecía Expósito para culminar la acción.

Alcolea se hizo gigante

Con una renta desfavorable de dos goles, el Atlético B atacó con más corazón que con cabeza. Óscar Fernández no tocó nada en el descanso aunque tardó apenas diez minutos en desdecirse. Dio entrada a Stèphane Emaná y Nico Schiappacasse, en detrimento de un flojo Ródenas y un esfumado Jorge Ortiz, con los que buscaba obtener mayor presencia en el área enemiga y potenciar el poderío aéreo que agitara el trabajado entramado defensivo del cuadro dirigido por el técnico Miguel Falcón.

Al equipo colchonero le costó entrar en calor y hacer buena la apuesta de juego que quisieron imprimir en los segundos cuarenta y cinco minutos. Con Arona Sané desaparecido en combate por la derecha, al filial tan solo le restó buscar las cosquillas por el izquierdo. Pero tanto Manny como Sergi no estuvieron al nivel que otros días, con un Expósito que frenó cualquier avance y tapó todo centro colgado desde ese costado. Fue tal la faena que tuvo que forzar una amarilla dando caza al extremo dominicano, algo que le condicionó ya que fue expulsado a falta de quince minutos para el final por querer ir de listo y pecar precisamente de lo contrario: entró al terreno de juego sin autorización mientras estaba siendo atendido y vio la segunda amarilla.

Alcolea repelió los más de veinte centros laterales que colgó el Atlético B en la segunda parte. Fue clave en la victoria del Toledo

Colgar balones fue la única manera que encontró el Atlético B de lastimar a su contrario. Hasta una veintena de centros llegaron desde los laterales pero todos encontraron el mismo destinatario: las manos de Pablo Alcolea. Ya fuera mediante saques de esquina o por juego corrido, Alcolea se hizo inmenso en su área. Tirando de tópicos, tal y como ha empezado servidor dicha crónica, el guardameta del cuadro toledano levantó una muralla con la que llegó a desesperar. Si su defensa no repelía las acometidas, él aparecía para dar ese poso de tranquilidad necesario. Primero con un remate de cabeza de Roberto Olabe y después con un cabezazo de Stéphane Emaná.  No pudo evitar el tanto de Toni Moya en el descuento, lo que daba ciertas opciones al filial en el filo del tiempo, pero sí estuvo presente para arrebatar de los pies el esférico a Nico Schiappacasse cuando el uruguayo controló en solitario un balón que le ponía de cara al marco.

Jony, expulsado

El choque, que se calentó en la segunda mitad después de que Jony Montiel se encarara con varios aficionados cuando fue sustituido y que se avivó con un Cristian Rodríguez que espetó en varias ocasiones "payasos" a miembros del Toledo, acabó en una tangana que se pudo evitar. Con los tres pitidos que indicaron el final del partido, el jugador del Rayo cedido en el Salto del Caballo saltó como un resorte del banquillo para celebrar los tres puntos en la cara de varios jugadores colchoneros.

El pique alcanzó su punto álgido cuando Jony, que se dirigió a varios rivales llamándoles "hijos de puta" según recoge el acta, lanzó el balón a la cara de un miembro del cuerpo técnico, siendo separado por integrantes del Toledo para que el acalorado duelo no fuera a más. 

Acabó el @AtletiAcademia B - Toledo (1-2) con bronca. Un jugador del Toledo tiró un balón a la cara a un miembro del cuerpo técnico del filial colchonero. pic.twitter.com/BxAr9CkDrJ

— Víctor Molina Pozo (@VictorMolina7) 18 de febrero de 2018

Puntuaciones VAVEL

3

Pablo Alcolea

2

Sergio García

1

Israel Castro