La apuesta del club para remplazar a su estrella es Borja Iglesias, el jugador gallego no cuenta con experiencia en Primera División pero este año ha brillado en la categoría de plata del fútbol español. Gracias a sus numerosos goles el Real Zaragoza estuvo muy cerca de ascender después de varios años fallando en el intento.

Borja Iglesias no es Gerard Moreno, de hecho, no se le parece en casi nada, el flamante nuevo fichaje del Espanyol es un punta de referencia, no cuenta con una velocidad endiablada ni ataca los espacios como lo hacía Moreno, es un rematador puro y sus cifras así lo demuestran, la pasada campaña disputó con el Zaragoza 39 partidos de liga y consiguió perforar la portería rival en 22 ocasiones. Además repartió 6 asistencias a sus compañeros. Para la popular web Transfermarkt, Iglesias pasó de tener un valor de mercado de 1.000.000€ a uno de 10.000.000€, multiplicando así por 10 su valor tras su sensacional campaña.

Iglesias en su presentación. Foto: Tomás Rubia VAVEL
Iglesias en su presentación. Foto: Tomás Rubia VAVEL

Es un delantero que juega muy bien de espaldas, es muy corpulento (1,87 m) y una de sus principales virtudes es la de aguantar el balón y jugar de cara para generar ventajas. Su capacidad asociativa es correcta, siendo capaz de fijar a los centrales y jugar de primeras con sus compañeros mejor posicionados. Los extremos y jugadores de segunda línea se pueden beneficiar mucho de las características de Iglesias.

Por lo visto en la pretemporada parece que en el esquema de Rubi no se contempla la idea de jugar con dos delanteros, por lo tanto se deja atrás el 4-4-2 tan característico de la época de Quique Sánchez Flores para pasar a un, más que posible. 4-3-3 en el que Iglesias sería la única referencia en la zona de ataque, acompañado, eso sí, por dos extremos que le ayudarán en las labores ofensivas.

Iglesias saliendo al césped del RCDE Stadium. Foto: Tomás Rubia VAVEL
Iglesias saliendo al césped del RCDE Stadium. Foto: Tomás Rubia VAVEL

Además de tener unas muy buenas condiciones físicas el gallego cuenta con algo muy valorado y buscado por todos los clubes, el olfato goleador, sabe estar siempre bien colocado para rematar a portería con pocos toques. También es un muy buen rematador de cabeza y tiene un muy amplio registro a la hora de disparar, sabe cómo golpear en cada momento.

El nivel que lució la pasada campaña hace presagiar que su temporada 2018-2019 también va a ser buena, además el jugador llega con 25 años, está cerca de alcanzar su madurez futbolística. Iglesias se enfrenta al mayor reto de su carrera, liderar el ataque de un equipo que ha dejado buenas sensaciones en los partidos previos al campeonato pero viene de una temporada gris, con demasiados altibajos y con la sensación de que se podía dar mucho más.