El conjunto de Nervión llegaba a Lituania con el objetivo de conseguir la victoria y pasar a los play off que le abrirían paso a la fase de grupos de la UEFA Europa League. Los hombres de Pablo Machín traían una ventaja de un gol del partido de ida en el Ramón Sánchez – Pizjuán y se enfrentaban a un escenario poco común: el césped del estadio del Zalgiris es artificial.
El conjunto español salía con: Vaclik; Gnagnon, Sergi Gómez, Carriço; Aleix Vidal, Amadou, Banega, Escudero, Sarabia, Nolito y Ben Yedder. Los lituanos jugaron de inicio con: Bartkus; Baravykas, Mbodj, Tomić, Slijngard; Antal, Manzorro, Blagojević, Mikoliūnas; Simkovic y Ogana.
El Sevilla necesitaba marcar pronto y así lo consiguió. En los minutos 5 y 6 llegaron los goles de Nolito y Pablo Sarabia, ambos tras jugadas combinadas y pases 'de la muerte'.
En los primeros quince minutos los andaluces llevaron la batuta de la orquesta sinfónica sevillista, que a punto estuvo de ampliar la ventaja con una pared de Amadou a Nolito. El disparo del sanluqueño se vio desviado por el guardameta Bartkus, al que parecía habérsele agotado toda su inspiración en el partido de ida, ya que encajó cinco goles.
En el 21’, intentó Escudero sorprender desde fuera del área, pero su disparo se fue alto. Al filo de la media hora de partido, Sarabia centró en busca de rematador, pero el balón acabó en las manos de Bartkus. Otra ocasión más del Sevilla, Ben Yedder la picaba hacia el lado haciendo inútil la salida del portero, pero despejó la defensa antes de que el esférico llegase a Nolito.
El Zalgiris Vilnius tuvo su oportunidad de recortar distancias con un fallo al despejar de Gnagnon, que Slijngard aprovechó y dio un pase al punto de penalti que no encontró a ningún compañero. Primer susto del conjunto lituano.
El Sevilla seguía buscando el tercer gol que sentenciara la eliminatoria y llegó en el minuto 43. Pablo Sarabia recibía un pase de Ben Yedder, que lanzó un gran disparo desde la frontal del área que entró rozando el palo de la portería lituana.
Con 0 a 3 en el marcador y 0 a 4 en el cómputo global, ambos equipos se marchaban a vestuarios sin ningún minuto extra en la primera mitad.
Tranquilidad y remate
Al inicio de la segunda mitad, el Sevilla realizó un doble cambio: se marcharon Escudero y Sarabia y entraron Arana y Luis Muriel. Por parte del equipo lituano, Mikoliounas salía del campo para dar paso a Nyuiadzi.
En los minutos iniciales de la segunda mitad, el Sevilla seguía llevando el control del partido pese a la alta presión del Zalgiris. En el minuto 56, Manzorro se marchaba y entraba Simkus. También se marchó Éver Banega y entró Berrocal, haciendo los tres cambios el Sevilla a falta de más de treinta minutos.
El Zalgiris se acercaba poco a poco a la portería de Vaclik, que atajó un lanzamiento de Nyuiadzi. El Sevilla no dejaba de pisar el acelerador y Muriel se quiso apuntar a la fiesta, pero su disparo fue desviado. Si el Sevilla no paraba, el Zalgiris tampoco, Vaclik paró un disparo lejano que se complicó, con una buena parada del checo.
En el minuto 74, Guillerme Arana vio la cartulina amarilla, siendo la primera hasta el momento. La falta correspondiente llevó a una ocasión lituana que despejó de nuevo Vaclik. Un par de minutos después, Muriel realizó un tiro cruzado que se fue por centímetros junto al palo de Bartkus.
Finalmente, el Sevilla cerró el partido con goleada incluida. Arana recibió un pase de Nolito en línea de fondo, recortó y puso un balón a la escuadra, imparable para el guardameta.
Pero todo no quedó ahí, Nolito, tres minutos después hizo su jugada característica y la puso en el palo corto tras el recorte. Una manita en Vilna.
Los lituanos intentaron maquillar el resultado con un disparo cruzado de Antal, pero sin nada más el partido llegó a su fin.