El Betis se ha plantado en Portugalete con las ideas claras, con la ambición de ganar y además, de hacerlo ofreciendo una buena versión. Para conseguir el 0-3 final y asegurar el pase de ronda, Rubi apostó por un once repleto de titulares habituales en Liga, y vaya si le funcionó. El técnico catalán, que ha pasado por rueda de prensa tras la victoria, se ha sincerado ante los medios: "Hemos preparado el partido como si fuera de Liga, mis jugadores se conocían perfectamente a los rivales. Lo afrontamos como uno más de competición, marcamos el primer gol y después aguantamos el achuchón para el segundo", aseguró.
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Rubi también ha hablado sobre el nuevo formato que tiene a día de hoy la Copa del Rey, un planteamiento que da mucha vida a los equipos más modestos del fútbol español: "Me gusta porque da mucha vidilla a equipos más modestos. Es bonito que reciban equipos de Primera y después, dentro de la igualdad, sorteo puro y los más modestos ya disfrutaron de ese partido con superior categoría. Los equipos de Primera van a todos pueblos de España y aumenta el riesgo, pero yo vengo de abajo y me hubiera gustado jugar contra el Betis en el Vilassar de Mar", apuntó.
Una de las sensaciones del partido fue Edgar, quien recibió varios golpes por parte de los jugadores del Portugalete: "Le han hecho vendaje, desde primer minuto me ha dicho que aguantaba bien y después del golpe le ha costado. Lleva muchos días sin 90 minutos y me interesaba que acabara el partido."
Respecto al rival, el técnico catalán ha hablado sobre el juego del Portugalete: "Es un equipo que compite fuerte, bien. El otro día los vimos y quizás no ha podido hacer más su juego, se pasa bien el balón y tiene automatismos, pero nosotros lo hemos hecho bien. Ojalá puedan ascender, porque es un club amigo para nosotros", sentenció.