Inmersos en un periodo de preparación que se antoja determinante de cara a la temporada 20/21, los integrantes de la primera plantilla de la Sociedad Deportiva Eibar cumplimentaron una nueva sesión de entrenamiento en Atxabalpe, a las 10:30 horas. Asimismo y atendiendo a las necesidades del equipo después de un mes de mini-parón con motivo de las vacaciones, las actividades realizadas por los futbolistas eibarreses se basaron en la adquisición de ritmo de competición y carga física, apartados fundamentales con la premisa de alcanzar un estado de forma óptimo que garantice buen rendimiento en los diferentes compromisos de la pretemporada.
Además, los pupilos de José Luis Mendilibar completaron con éxito una doble sesión llevada a cabo el pasado martes 18 de agosto con el objetivo de agilizar una etapa preparatoria en la que las agujetas, las molestias y las dolencias físicas se han convertido en habituales; problemática que se ha agudizado con motivo de los casi cuatro meses sin competir y entrenar a causa de la COVID-19. Sobremanera, el poco margen de descanso entre el desenlace de la competición doméstica 19/20 y el inicio de la pretemporada ha permitido a lo jugadores poder seguir en plenitud física pese a contar con momentos para recargar pilas.
En la misma línea y vislumbrando lo que puede dar de sí la preparación de la SD Eibar, se espera que el equipo comience a entrenar aspectos del apartado táctico en los próximos días. Todo ello, sin perder de vista las posibles incorporaciones que se puedan acometer, con la finalidad de reforzar posiciones huérfanas como el lateral izquierdo, ciertas zonas de la medular o la línea de ataque. Entretanto, los integrantes de la primera plantilla armera continúan concentrados en el encuentro ante el Club Deportivo Mirandés que se celebrará el viernes 21 de agosto, a las 18:30 horas, en Atxabalpe.