Este Granada demuestra que cuando quiere, puede

El cuadro rojiblanco dejó una de las mejores imágenes de la temporada en la importante victoria frente a la UD Las Palmas

Este Granada demuestra que cuando quiere, puede
Los jugadores del Granada celebran uno de los goles frente a la UD Las Palmas | Foto: LaLiga SmartBank
manuelruizgrx
Por Manuel Ruiz

Como en cualquier deporte, el fin último en el fútbol es ganar. Para conseguirlo se pueden explotar infinidad de caminos, todos ellos lícitos, pero algunos más vistosos que otros. Si además de ganar, un equipo es capaz de hacerlo con un fútbol atractivo y divirtiendo a su afición, miel sobre hojuelas.

El pasado sábado, el Granada CF consiguió una victoria fundamental para prolongar sus aspiraciones de ascenso directo a Primera División. Los tres puntos cosechados sirvieron para sobrepasar a Las Palmas y situarse en puestos de promoción directa. Y lo hizo fraguando un primer tiempo primoroso en el que la intensidad, la presión y el acierto de cara a gol enamoró y enganchó al respetable que se dio cita bajo un sol de justicia en Los Cármenes.

La afición nazarí no es precisamente exigente en lo que a fútbol vistoso se refiere, pero sí que valora muy positivamente el esfuerzo y el despliegue físico de los jugadores que defienden la rojiblanca horizontal. Este hecho permitió una comunión total entre grada y césped que sirvió para llevar en volandas al equipo hasta la victoria, no sin sufrimiento y superando algún bache en el segundo tiempo.

La sensación que dejaron los pupilos de Paco López es que cuando quieren, pueden. A diferencia de las dos últimas salidas a Gijón y Zaragoza, nefastas en cuanto a resultados y sensaciones, el pasado sábado el cuadro rojiblanco aumentó el nivel de concentración desde el inicio y supo imponerse con rotundidad a un rival directo rayando al nivel que se le espera por la calidad de su plantilla.

Lo que pudo haber sido

Tanto es así que lo que más se escuchaba a la salida del feudo zaidinero era “si hubiéramos jugado así todo el año…”. Es cierto, de haber mostrado la cara de la primera mitad del sábado en muchos de los encuentros disputados a lo largo de la temporada, probablemente el escenario actual sería bien distinto. Bien es cierto igualmente que la cantidad de puntos que se han conseguido como local está fuera de todos los cánones.

No obstante, todo eso pertenece ya al fútbol ficción y toca centrarse en lo que viene: seis jornadas de auténtico vértigo en las que hay muchos duelos directos y en las que los dos que menos errores cometan sellarán su billete para Primera División. Lejos de resignarse por el pasado, la afición debe apoyar como sabe hasta el final y confiar en que los jugadores sigan dando la imagen que se espera de ellos. Ni más, ni menos.