Este sábado a las 13:00 horas el Real Club Deportivo Espanyol y la Sociedad Deportiva Eibar disputarán un partido que tendrá aires de venganza para los armeros, pues el precedente más inmediato, que tuvo lugar en el mismo escenario del partido, supuso para los de Mendilibar una dura derrota por cuatro goles a dos.
Esfuerzo sin recompensa y castigo
El partido, no obstante, se inició con un Eibar animado en busca del tanto que les pusiera por delante en el Power8 Stadium. De este modo fue el azulgrana el primer conjunto que dispuso de una importante ocasión de adelantarse: un disparo de Keko sacado por el meta Pau López.
A pesar de eso los pericos se adelantaron con un gol de Gerard Moreno. Después llegó el primero de Marco Asensio, que lució estelar. 2-0 y el Eibar, en la lona moralmente. Así se llegó al descanso.
Reacción y más castigo
Tras la reanudación el Eibar se puso al asalto de la meta del Espanyol y forzó un penalti que transformó Borja Bastón. Pero eso solo fue un espejismo porque los blanquiazules marcaron dos más (Asensio uno) y se pusieron 4-1. Sergi Enrich, que este sábado estará presente, maquilló el resultado final con un remate de cabeza a puerta vacía tras una prolongación a un centro lanzado desde la banda.
En definitiva, el electrónico se detuvo en el 4-2, algo que no satisfizo los intereses del cuadro armero. Ahora, la oportunidad de resarcirse marca un partido, el del sábado, que será importante para el Eibar no solo por eso sino porque, de perder, encadenaría su segunda derrota en liga consecutiva. Recordemos que la semana pasada perdió en casa por 2-3 contra el Club Atlético Osasuna en un partido que mostró un Eibar desdibujado, irreconocible. Por eso hay tanta presión este fin de semana sobre los armeros, que pueden ver peligrar su puesto actual en la clasificación si repiten el guión del último encuentro.