El pasado verano la directiva del Eibar presentaba a Fran Rico para reforzar el centro del campo y la zona ofensiva del equipo. El gallego, que llegaba en calidad de cedido desde el Granada tenía que asumir la competencia en su posición, con jugadores como Escalante o Dani García, asumió su rol dentro del equipo y, desde entonces, ha rendido a un gran nivel.
Sin embargo, en el último partido ante el Athletic no pudo mostrar el mismo nivel que el resto de la temporada. Quizá fruto del poco juego y la poca producción ofensiva que el equipo consiguió elaborar en el centro del campo; quizá porque el Athletic es un conjunto al que le gusta tener el balón quitándoselo al rival; o quizá simplemente poque el gallego no tuvo su día. La realidad es que intervino muy poco. De hecho salía sustituido del terreno de juego en el minuto 85 por Jota Peleteiro con el partido aún abierto, minutos en los que el equipo aún podía ir en busca del empate.
Los aficionados armeros esperan ver en los próxmos partidos a ese jugador que se hizo con la titularidad nada más llegar; ese jugador que ha sido capaz de conectar el medio campo con la delantera, siendo capaz de combinarse perfectamente con los extremos -Pedro León, Inui y Bebé-; y que también ha sido capaz de hacer goles.
El más importante sin duda, el gol que conseguía en el histórico empate que conseguía sacar el Eibar en el Santiago Bernabéu ante el líder de la clasificación, el Real Madrid. Tras un centro de Ander Capa desde la banda derecha, Fran Rico lograba anticiparse a la defensa madridista para cabezear el centro y batir a Keylor Navas. El otro gol que conseguía esta temporada entró en las páginas históricas del Eibar: su gol ante el Celta de Vigo aprovechando un rechace tras un remate al palo de Adrián González se convertía en el tanto número 100 del Eibar desde que ascendiera a Primera División allá por 2014.