El sábado 25 de febrero de 2017, en marco de la jornada 24 de Liga la Sociedad Deportiva Eibar recibirá al Málaga Club de Fútbol. Dicho encuentro, tendrá como epicentro al Estadio municipal de Ipurua. El elenco vasco en su último compromiso cayó cuando visitó el Ramón Sánchez Pizjuán ante Sevilla. El Nervión les venció por dos goles a cero, gracias a los goles de Pablo Sarabia (30') y Vitolo (90'). El Málaga mientras tanto consiguió la victoria en forma de local. Allí en La Rosaleda superaron dos a uno a la Unión Deportiva Las Palmas. Mauricio Lemos (19') adelantó al conjunto canario, pero Pablo Fornals (27') y Charles (35').
El séptimo local versus un visitante ineficaz
Los azulgranas y blanquiazules, atraviesan un presente diferente. Los de José Luis Mendilibar se ubican en la séptima posición con 35 unidades como consecuencia de sus diez victorias, cinco empates y ocho derrotas. Los de Marcelo Romero tienen un bagaje de seis victorias, ocho empates y nueve derrotas. Respecto de las condiciones en que ambos afrontarán el siguiente cotejo, el Eibar se ubica como séptimo de los equipos anfitriones con 23 unidades entre Liga y Copa. El Málaga de los equipos a domicilio, se posiciona como décimo séptimo siendo uno de los más ineficientes sin victorias en esta condición y apenas seis empates.
En el último partido frente a Las Palmas, Romero dispuso de un equipo titular en base al 4-2-3-1 como táctica. Bajo palos se ubicó Carlos Kameni. La última línea colocaba a dos laterales de proyección: Roberto Rosales (derecha) y Juan Carlos Pérez López (izquierda). Desde la zona central de la retaguardia estuvieron: Luis Hernández (centro-derecha) y Martín Demichelis (centro-izquierda). En el eje del mediocampo Ignacio Camacho y José Rodríguez se encargaron de la distribución. Finalmente como mediapuntas: Sergio Gontán (Keko) en el extremo derecho, Pablo Fornals (mediocentro) y Gonzalo Castro en el ala izquierda antecedieron a Charles quien fue el centrodelantero.
Como características de juego, el entrenador uruguayo le imprimió una impronta particular malagueño: en ella sobresalen los ataques directos por la banda con Keko y Gonzalo Castro de extremos puros. Ambos futbolistas, desequilibrantes en el uno a uno, capaces de atacar el espacio, con un golpeo de balón destacado y que gracias a su habilidad técnica pueden centrar con facilidad para asistir a Charles. Pablo Fornals suele contactarse con Gontán para formar una falsa pared aunque también culmina las acciones como falso '9'. Asimismo Roberto Rosales frecuenta compaginarse con el extremo derecho. En el otro costado, Juan Carlos incursiona ofensivamente pero con menos asiduidad. Cuando el balón no pasa por el eje, uno de los dos se adelanta para servir de apoyo y abrir hacia los costados.
Puntos flacos y gordos del blanquiazul
A diferencia de los rivales precedentes que enfrentó el Eibar (Granada, Sevilla), el Málaga se caracteriza por no presionar alto. Pero esta circunstancia se hace efectiva a la hora del saque de portería. Como puntos más vulnerables se encuentran la salida del balón y las espaldas del doble pivote. En la primera cuando Camacho-Rodríguez intentan dar el primer pase sufre anticipaciones y en la segunda, se observó en más de una oportunidad cómo los volantes de Las Palmas le tomaron las espaldas al medio blanquiazul generando situaciones de peligro en la frontal del área. A estas dificultades se agrega el juego brusco que lleva a cabo. Al ser un equipo largo en el que no se caracteriza por ser un colectivo de llegar a tiempo, realiza muchas faltas en la frontal. Asimismo con la incorporación de los laterales rivales, sufre por los costados tanto en los balones cruzados como pases interiores.
Desde lo positivo destaca el volumen ofensivo que le otorgan sus extremos. Tanto Keko como Chory Castro son idóneos para un dispositivo de contragolpe: lanzan diagonales que dañan a cualquier rival que se halle desprotegido comenzando en la banda y pudiendo finalizar de '9'. Otro de los elementos a valorar, el potencial aéreo de Charles. El hombre de área blanquiazul siempre está atento a los envíos que puedan efectuar los dos extremos, como así también la llegada de una segunda línea como Fornals quien se inclina a formar un doble ataque al lado del ariete lo que generaría un cuatro versus cuatro desde el tercio superior. Desde una perspectiva similar, priman los ataques directos: el Málaga no precisa dominar para convertir. Así lo demostró ante Las Palmas sin brillar le dio la vuelta al marcador en un abrir y cerrar de ojos, aprovechando una segunda jugada y atacando al grano.
Variantes posicionales
Durante el encuentro ante Las Palmas, Romero varió el formato de ordenar a sus dirigidos. Entre otros dibujos: 4-4-2/4-5-1,3-2-5, 4-4-1-1, 5-3-2/5-4-1, 4-2-4, 4-4-1 y 5-3-1. El panel del movimiento malagueño osciló en un repliegue que dejaba a Charles en punta, una línea defensiva de tres que aprovechaba la incursión en el ataque por parte de Rosales, Fornals flotando en el mediocentro, una banda derecha reforzada tras la expulsión de José Rodríguez con dos laterales puros. Miguel Torres y Roberto Rosales, Pablo Fornals ocupando el extremo derecho.