El Granada CF ha disfrutado de una semana de relax a causa del parón liguero por los compromisos internacionales. Lucas Alcaraz, contando con hasta nueve bajas, ha dado tres días de descanso a la plantilla que volverá este martes a los entrenamientos para preparar el choque del próximo domingo en Los Cármenes ante el FC Barcelona, a partir de las 20:45 horas. Será el primero de tres que tendrá en apenas siete días. Los rojiblancos vuelven a la realidad.

Barcelona, Deportivo y Valencia. Seis puntos en juego que pueden aumentar, si las hay, o descender, las opciones de permanenciaY la realidad no es otra que la penúltima plaza. Tras la derrota en Gijón, tanto el club como la afición ha tenido tiempo de analizar y comprobar que la salvación este año está muy cruda, casi imposible. Comenzó a forjarse en Leganés y terminó por concretarse en el Molinón, aunque no oficialmente. Este domingo se presenta el equipo de Luis Enrique en el feudo del Zaidín y los nazaríes deberán sacar la etiqueta de "matagitantes" para recuperar algo de terreno a sus perseguidores. Tras ese partido, no habrá tiempo que perder porque el miércoles de la semana siguiente, el Granada viajará a Riazor, un nuevo rival directo. Terminará la semana el Domingo de Ramos ante el Valencia de Voro

[Foto Antonio L. Juárez]

"Van a quedar luego siete partidos y va a depender bastante de las victorias que podamos conseguir en estos tres encuentros, pero en un universo de diez partidos, un 30% es muy importante", comentaba Lucas Alcaraz en una entrevista al diario granadino Ideal. En ella también habló de las posiblidades de permanencia: "No me gusta hacer números pero sí marcarme objetivos. El objetivo es ganar el siguiente partido, pero tenemos que tener un horizonte a la vista. Y ese es el de los 37 o 38 puntos", manifestó. También dejó claro, entre otras cosas, que "la afición ha estado y está muy por encima nuestra en cuanto a convencimiento y a comportamiento" pero es el equipo el que tiene "un arma para demostrar nuestro compromiso sobre el césped".