Sam Lowes no quiere que se le escape el título de  Moto2. Esto se puede ver porque, a pesar de haber conseguido cuatro podios y alzarse en la primera posición en Jerez, apuesta por llevarse el gato al agua sobre el mítico asfalto holandés. El mandamás del equipo, Fausto Gresini, ha reconocido que esperaban más en las dos últimas carreras y que tendrán que luchar en los Paises Bajos si no quieren descolgarse del campeonato.

Así, en las declaraciones a la página web del equipo Gresini, se ve la ambición del piloto británico, quien ha reivindicado la necesidad de “luchar por la victoria” tras una carrera, la de Montmeló, en la que no pudo brillar con fuerza. Tras pasar por la bandera a cuadros  solo pudo firmar una discreta sexta posición, con la que vio como Alex Rins le quitaba el liderato.

No obstante, los ánimos no están caldeados. Al contrario, parece que este discreto  resultado ha servido para dar una dosis extra de motivación. Por eso ha reconocido que “trabajaremos duro en el circuito y sabemos que podemos hacer un buen trabajo en Assen”.

La catedral es un circuito al que Lowes se ha adaptado  ya que, el año pasado a lomos de una Speed Up, pudo llegar hasta el tercer cajón del podio. Él mismo reconoce que “disfruto del circuito, algunas partes se adaptan a mi estilo y siempre he tenido buenas sensaciones en el pasado”.

No lo tendrá fácil  para conseguir el entorchado. Sus rivales llegan muy fuertes. Johann Zarco intentará conseguir su tercera victoria consecutiva y Alex Rins hacerse fuerte en la primera posición del podio. Sin embargo, ver a los tres en la mejor forma posible hará las delicias de los aficionados, que podrán ver, por primera vez, como la carrera se correrá el domingo en Assen.