Ya todos conocen a Milos Raonic. El tenista canadiense dispone de uno de los mejores servicios del mundo y de los últimos lustros, unido a una movilidad insospechada para un hombre de sus dimensiones. Milos Raonic se encuentra en tercera posición, pero este año pide algo más, pide un título de grandes dimensiones. Es ambicioso, como así demuestran sus numerosos cambios de entrenador en busca del salto cualitativo que le haga competir aún más con los mejores jugadores de la élite.
La solidez y la mentalidad son los conceptos que pueden definir mejor lo vivido por Milos Raonic en su enfrentamiento ante Diego Schwartzman. El tenista argentino se vio sin argumentos con los que contrarrestar la solidez de Raonic, impotente ante el despliegue de saques hechos por el canadiense. Doce saques directos y un 75% de puntos ganados con primer servicio, hicieron que Raonic fuera una muralla inexpugnable para su rival.
El partido arrancó como se esperaba. Ninguno de los jugadores sufría en sus turnos de servicio, y los puntos cortos eran la tónica dominante. En el cuarto juego llegó el primero de los muchos despistes que terminarían por sentenciar a Schwartzman. Un despiste en forma de rotura, fue suficiente para que el canadiense se apuntase el primer parcial por 6-3.
Doce saques directos y un 75% de puntos ganados con el servicio
Fue una losa que no pudo levantar el argentino como consecuencia del nivel estelar de Raonic al saque. Pero no solo fue eso el canadiense, sino que se desplazó a las mil maravillas y conectó numerosas derechas ganadoras. Milos tan solo perdió siete puntos con su saque, impidiendo que Schwartzman pudiera tener alguna opción al resto. 6-2 en el segundo set y clasificación para cuartos de final.
El canadiense va recuperando poco a poco su mejor versión, jugando agresivo pero sin precipitarse, y encontrando los apoyos necesarios para conseguir golpes ganadores. Especialmente importante fue para Milos cerrar por la vía rápida este encuentro, y es que en algo más de una hora, Milos Raonic superó sin excesivos problemas el primer partido oficial de la temporada, en Brisbane, territorio donde el tenista canadiense venció la pasada temporada ante Roger Federer en la gran final.
En cuartos de final, el tenista canadiense espera rival del encuentro que enfrenta al alemán Misha Zverev frente al español Rafael Nadal, en un encuentro donde el tenista español parte como gran favorito por como llega al partido, con la consecución de su cuarto Mubadala World Tennis Championship.