Los murmullos de desaprobación e incluso pitos hacia Monfils se sucedieron en una asombrada Arthur Ashe, que no entendía la actitud del galo durante su encuentro frente a Novak Djokovic. Y es que fue uno de los partidos más extraños que pueden recordarse desde hace tiempo, con ambos contendientes erráticos, nerviosos y un Monfils que llevó la apatía a su máximo extremo.
Se preveía una rueda de prensa candente y las expectativas se cumplieron. Los periodistas se presentes se lanzaron a Monfils cual perros de presa, pidiendo explicaciones sobre su actitud durante muchos tramos del partido, a lo que Monfils no se achantó en absoluto. "Todo iba muy rápido. ¿Qué debía hacer? ¿Seguir igual y perder 6-0 o cambiar algo?", dijo el galo en referencia al 5-0 inicial para Djokovic. "Así que por eso intenté meterme en su cabeza e intenté crear algo nuevo para él. Y eso fue todo. Al final, creo que fue necesario ya que casi vuelvo en el primer set", concretaba.
Todo pareció deberse a una estrategia como confirmó el propio Monfils. "Cuando decidí jugar así, sabía que iba a ser diferente pero yo no juego para nadie. Juego para mí mismo. Intento ganar, ¿sabes?". El tono de Gael subió cuando fue preguntado sobre si estaba compitiendo, a lo que respondió: "¿Que si estaba compitiendo? ¡Joder, pues claro que estaba compitiendo! Al final, todo el mundo tiene una opinión pero ellos no están en mi cuerpo, no están en mi mente. Cuando el de enfrente es muy bueno, intentas cambiar. No habré sido académico, pero intenté ser mejor", afirmaba el francés que logró arrancar un set a Djokovic en medio del caos.
No hubo referencias a los supuestos problemas físicos que tuvo en su rodilla izquierda, pero sí para hablar largo y tendido de las acusaciones de John McEnroe hacia Gael, señalando que su actitud no es profesional. "No tengo nada personal contra él. Me pone triste escuchar eso de él. Muy triste de que una leyenda me critique así porque, John, yo lo que quiero es ser el mejor. Es difícil, pero lo hago lo mejor que puedo", argumentó un Gael que parecía realmente dolido con las declaraciones del mito estadounidense. "Lo siento si piensas que no soy profesional, pero imagino que estoy trabajando, estoy aprendiendo. Por supuesto que me caigo, pero intento levantarme. Es duro, porque cuando me dices que no soy profesional, estás diciendo lo mismo de mi entrenador, de mi fisio, de todo mi equipo y eso es una palabra muy fuerte", dijo dejando claro que había considerado una falta de respeto lo dicho por John. Incluso se mostró decidido a hablar con él si era necesario.
"Es fácil pegarme un palo a mí porque yo no he ganado nada. Es muy fácil. Yo hago cosas diferentes y lo hago feliz. Siempre con una sonrisa. Él sabe lo que es esto, estaré más que feliz de hablar con él pero me entristece de que me haya criticado así de fácil". Así terminó una comparecencia realmente polémica que dejó un poso de duda en todos los presentes acerca de por qué Monfils había adoptado esa actitud, siendo algo extraño para ser considerado una estrategia.