El Singapoure Indoor Stadium vio inaugurada la WTA Finals 2016 de la mano de Simona Halep, número cuatro del circuito femenino y Madison Keys, novata en la competición, que medían nueva mente sus fuerzas después de varios enfrentamientos a lo largo de la temporada. El evento asiático dio lugar a otra nueva victoria de la jugadora rumana, veterana en el torneo, que supo leer a la perfección la estrategia de la norteamericana. Abusando de la profundidad desde el fondo, haciendo gala de su solidez y de su astucia, Simona Halep ha conseguido posicionarse como primera en el grupo rojo a expensas del enfrentamiento entre Angelique Kerber y Dominika Cibulkova.
Simona Halep era la favorita para embolsarse la contienda desde la previaSimona Halep era la favorita para embolsarse la contienda desde el principioEl azar quiso que Simona Halep y Madison Keys, dos profesionales con estilos de juego muy opuestos, dieran el pistoletazo de salida a la gran final de tenis femenino mundial, aunque la rumana partía con plena ventaja antes del inicio por su contundente 4-1 en las estadísticas de enfrentamientos entre ambas. A pesar de ello, tanto la número cuatro del mundo como la campeona de Birmingham han tenido una temporada con sobre saltos, donde la irregularidad en las principales citas ha predominado.
Desde el principio el despliegue de recursos y la paciencia de la de Constanza martirizaron a Madison Keys, que finalizó el primer set con un contundente 6-2 en contra. Sufriendo bastante con su servicio intentaba resarcirse a base de derechas, aunque la impotencia se acababa apoderado de ella. La resistencia y la habilidad abanderaban el recital de Simona Halep, que llevó en numerosas ocasiones al extremo a su oponente. La segunda manga fue más reñida, aunque finalmente la tenista rumana impuso un 6-4. No obstante, Madison Keys mostró una notable mejoría, pudiendo atacar con más dureza los ángulos de la campeona del Mutua Open de Madrid y de la Rogers Cup este ciclo.
El público asistente vio una versión vulnerable de la estadounidense, poco acostumbrada a estos importantes retos e indispuesta a la hora de imponer su ley. Si Madison Keys quiere seguir teniendo opciones para avanzar en la futura eliminatoria deberá corregir sus errores de cara a los enfrentamientos con la número uno del mundo y con Dominika Cibulkova.