Elise Mertens continua demostrándole al mundo y a si misma de lo que es capaz partido tras partido, y el de octavos de final en el Abierto de Australia contra Petra Matric no fue la excepción. La belga se impuso 7-6 y 7-5 para continuar con vida en el Grand Slam. Mertens se ha convertido en una de las tenistas que más lugares ha escalado en el ranking de la WTA últimamente. En el 2016 se encontraba en la posición 120 y hoy es la número 36 del mundo. Más que sentirse presionada por su rival, hoy Mertens estuvo más inspirada y enfocada en ganarle a Matric.
La determinación de la belga por seguir haciendo historia en Australia se notó desde un principio cuándo ganó los primeros cuatro juegos. Sin embargo, luego vinieron errores de concentración que permitieron que la croata igualara el partido. Después de haber aprovechado sus primeras dos oportunidades de quiebre, Mertens dejó ir seis en el resto del set. Por lo tanto se tuvo que apoyar de su primer servicio para sacar ventaja ante su rival, ganando el 79% de sus puntos en dicho saque.
El primer parcial fue decidido en un tiebreak a favor de la belga de 22 años. Sin embargo los nervios en ella eran evidentes y su rival, con un poco de más experiencia, no se daba por eliminada tras haber perdido el tiebreak. El segundo set puso a prueba a ambas, tanto su nivel de tenis cómo su capacidad para controlar las emociones. Los octavos de final era una ronda que ninguna de las dos había logrado superar en sus carreras.
Mertens inició poniéndose un break arriba en el segundo set. Martic pidió un tiempo fuera debido a una molestia muscular, la cuál aprovechó para calmar las aguas y hasta salió de la cancha para ser atendida. En el momento que se reanudó el juego la croata no tardó en emparejar el partido. Así que una vez más, punto a punto, esto se convirtió en una guerra dentro del rectángulo. Petra tuvo más errores no forzados (36), pero también supo dar pelea cuándo parecía que Mertens se llevaría el partido, salvando oportunidades de partido en contra.
A final de cuentas, Mertens apretó con el servicio a su favor. Tras haber quebrado el servicio de Martic y con cuatro puntos consecutivos en su saque, la ganadora del Abierto de Hobart selló el segundo set a su favor. Su novena victoria consecutiva la lleva a disputar su primer partido de cuartos de final en uno de los cuatro grandes. Mertens, una desconocida para muchos es ahora foco de atención en Melbourne ya que se coloca dentro de las mejores ocho del torneo sin perder un solo set. Su rival saldrá del partido entre Elina Svitolina y Denisa Allertova de República Checa.