El poderoso se jugaba una fecha crucial para volver a dormir entre los ocho mejores del campeonato, enfrentaba al actual campeón del balompié de nuestro país el conjunto pijao dirigido por Hernán Torres, necesitaba ganar y sumar esos tres vitales puntos, pero nuevamente empató como local, tercer igualdad de manera consecutiva y empieza a quedar con muy pocas posibilidades de acceder a la fase final del campeonato.

Previo a este encuentro Independiente Medellín llegaba con un muy buen punto conseguido ante el líder y clásico rival Atlético Nacional, pero para ratificarse en la pelea en una liga muy cerrada tenía que ganarle a Tolima para no cederle el terreno a sus rivales, es por esto que Comesaña planteó un partido distinto, esto por algunas ausencias como la de Didier Bueno por molestias físicas además de David Loaiza que llegó a la quinta amarilla y se perdió el encuentro.

Aproximadamente a las seis y cinco de la tarde el juez central del compromiso daba la orden para que rodara el balón en el Atanasio Girardot, el partido comenzaba de ida y vuelta, pero el que tenía las opciones más claras era el visitante, que se acercaba al arco defendido por Andrés Mosquera Marmolejo y lo exigía, Medellín también tuvo una aproximación, pero se fue a la línea final.

Corría el minuto 18 del primer tiempo, Daniel Cataño en la zona derecha tomó el balón a pase del defensa desde atrás, acomodó la pelota, da un muy buen centro y se cumple la ley del ex de Juan Fernando Caicedo quien de manera fenomenal superaba a Juan Guillermo Arboleda en las alturas y se anticipaba para poner el 0-1 de la noche en la ciudad de la eterna primavera con un cabezazo letal, disculpas ofrecidas por el delantero, pero el pijao ya estaba montado en el marcador.

Duro golpe que sufrían los dirigidos por el uruguayo Comesaña, además del gol no encontraban un fútbol que los devolviera al partido, fueron aproximadamente 25 minutos de muchas confusiones, entregas erráticas, silbidos por parte de la afición y hasta desconcentración en la zona de ataque en el equipo del pueblo.

A partir del minuto 28, Independiente Medellín empezó con más ímpetu que fútbol, esto también por la necesidad de buscar el resultado, tomó las intenciones de juego y se volcó a buscar el empate y hasta poder seguir de largo, tuvo acercamientos y profundidad cuando lanzó al ataque a los laterales, Germán Gutiérrez y Kevin Londoño quien le correspondió actuar en aquella posición por las lesiones y suspensiones que tienen algunos jugadores del club.

Por lo cual, al minuto 37 después de un muy buen arranque de Londoño que ve a Castro y se la pasa, controló de muy buena manera el delantero que superando al zaguero central Mosquera, gana la línea final y en un pase a las cinco con cincuenta encontró a Vuletich que se lanza y marca el empate para que el Atanasio se desahogara y pudiera celebrar la igualdad.

Fue así como se terminaron los 45 minutos, el rojo fue de menos a más y estaba superando al Vinotinto y oro luego de ir por debajo en el funcionamiento y en el marcador, aunque ya había dejado la igualdad, el resultado no era el que necesitaba para las aspiraciones de todo el plantel.

Los segundos 45 minutos comenzaron sin cambios en ambos planteles, los mismos 22 jugadores salían a continuar con un encuentro entretenido, con opciones de gol y dos tantos anotados. En este arranque Leonardo Castro recibió la cartulina amarilla por una fuerte entrada al rival, pero al rey de corazones se le notaba con la misma actitud con la que termino el primer tiempo, con la necesidad de buscar el valioso triunfo.

El reloj marcaba 64 de la etapa complementaria, el lateral izquierdo Gutiérrez se equivoca pero retoma la jugada, se la quita al defensor del Tolima, el cual protesta que el esférico abandonó el terreno de juego en la lateral, los árbitros dejan seguir, ‘Vlacho’ hizo una buena pausa con tranquilidad en un tres contra tres se la toca dentro del área a Germán que de primera la suelta para Leonardo Castro, que remata y de manera espectacular atajó Montero, en el rebote el balón quedó dando botes hacía la línea allí la despeja Quiñones pero le queda a Vuletich que remató fuerte anotando el 2-1, firmando su doblete y la remontada roja.

Hasta aquí todo era felicidad y una mejoría notable en el juego, desde el minuto 72 el equipo del pueblo intentó jugar a la contra, controlar y manejar el partido para asegurar el resultado, el Vinotinto y oro intentaba por medio de Anderson Plata que era quien más insistía en la visita, además el director técnico Torres movió las fichas para conseguir un punto, retiró a un mediocampista Leyvin Balanta e ingresó a Albornoz, otra sustitución fue la de Cataño por Yohandry Orozco para buscar la movilidad en ataque.

También refrescó más la mitad de la cancha reemplazando a Ríos por Celis y por último sacó a Caicedo, que se fue aplaudido por la gran mayoría por su pasado en el equipo, por el paraguayo Gustavo Ramírez, aún así no se veía por donde Tolima podía empatar el encuentro, Medellín también lo intentaba a la contra, pero aguantaba el marcador que tenía.

Añadieron cuatro minutos de reposición, se sentía cada vez más cerca una gran victoria con muchas bajas y ante un gran rival como es el Deportes Tolima, pero en una desconcentración de todos los jugadores, Julián Quiñones desde el fondo mete un pelotazo al área, todos pasan de largo, Arboleda cubría la pelota, pero se olvidó de Gustavo Ramírez, que se anticipó y el guardameta Mosquera Marmolejo dudó también y el paraguayo anotpi el empate 2-2 definitivo en los minutos finales para la euforia tolimense y para la decepción de todos en el máximo escenario de los antioqueños.

Con este resultado el poderoso sigue dejando muchas dudas y vuelve a darle ventaja a muchos rivales que ya habían actuado y se aleja de los ocho mejores clasificados, ahora enfrentará dos juegos directos, uno el próximo martes entre semana visitando a Alianza Petrolera en el Daniel Villa Zapata y después recibirá dentro de ocho días a la sorpresa del torneo Deportivo Pereira que viene en un nivel excepcional y querrá clasificar y zafar en totalidad del descenso.