El Artemio Franchi vistió sus mejores galas para acoger todo un clásico del fútbol italiano, un Fiorentina-Udinese. Pese a que la bella ciudad de Florencia presenciaría un auténtico partidazo entre dos históricos del calcio, éste, se vería relegado a un segundo plano en cuánto a mejores partidos de la jornada se refiere. Ayer mismo se disputaron el Juventus-Lazio y el Roma-Napoli y pocas horas después de este increíble partido partido se podrá disfrutar de uno de los partidos más historicos de toda Italia, Inter-Milan.

Sin embargo, estos tres espectaculares partidos no privaron a todos aquellos aficionados que se acercaron al coqueto estadio florentino de ver un gran partido de fútbol. Todo aquel que pagó su entrada, excepto los aficionados friulani, se marcharon contentos del estadio viola pues vivieron un auténtico partidazo.

Así fue...

Tanto Fiorentina como Udinese llegaban al partido con hambre de victoria, mucha hambre. Los tres puntos eran una obligación para ambas escuadras, éstos, permitirían comprobar que dirección cogería la temporada de los dos conjuntos. El que consiguiera salir del Artemio Franchi con los tres puntos en su bolsillo podría volver a aspirar a la parte noble de la tabla, por contra, el derrotado se vería relegado a los puestos cercanos al temido descenso.

El partido se decantó rápidamente del bando local. Los chicos de Pioli quisieron desde los primeros minutos tener todo bajo control y hacer disfrutar a todos los aficionados viola. El Udinese, sólo podía defenderse e intentar contragolpear los ataques fallidos de sus rivales, los florentinos no daban opción a otra cosa pues cada vez que los bianconneri intentaban crear una posesión larga, la defensa, raudamente recuperaba el esférico y lo cedía al creativo centro del campo.

Veretout y Badelj llevaron la manija del encuentro y su gran control de los tempos del juego permitieron que el bueno de Chiesa hiciera magia, para deleite del público y de sus propios compañeros. Thereau avisó por primera vez al estrellar el balón contra la  madera tras una gran jugada individual. Sin embargo, el francés no perdonaría dos veces, no estaba dispuesto a ello. Centró magníficamente desde la banda derecha el joven Chiesa, el cuero fue rematado por Gio Simeone que no logró conectar bien y coloca la pelota con fortuna en las inmediaciones del área pequeña, Thereau aprovecha el despiste de la defensa y hace el primero de la tarde a bocajarro, inalcanzable para el guardameta rival.

El acoso y derribo sobre la portería del Udinese continuó hasta el fin de la primera parte pero la madera evitó que el hijo mayor del 'Cholo' Simeone hiciera el segundo del partido. Con 1-0 nos fuimos al descanso aunque los gigliati se quedaron con mal sabor de boca pues merecieron más.

La Fiorentina celebrando su primer gol del partido | Foto: AFC Fiorentina
La Fiorentina celebrando su primer gol del partido | Foto: AFC Fiorentina

Quince minutos más tarde volvió a reanudarse el juego con una tónica similar a la del primer tiempo. Poco después de iniciarse la segunda mitad, Thereau sentenció el encuentro tras rematar en boca de gol un rechazado disparo del centrocampista Veretout. El Artemio Franchi era una auténtica fiesta, la Fiorentina volvía a hacer ilusionar a su hinchada y estos les recompensaban con múltiples cánticos y vítores.

La tranquilidad duraría poco dado que en el minuto setenta y dos el Udinese recortaría distacnias gracias a un gran gol de Samir al rematar una falta lanzada desde el lateral, el equipo de Udine se metía en el partido. Poco duraría esta sensación puesto que quedaban escasos minutos antes del final del partido y Pioli aún se guardaba un as en la manga.

El técnico local agotó sus cambios y se encerró atrás, al estilo Mourinho, usando la estrategia comumnmente conocida como: "el autobús". Sustituyó tres hombres de ataque para meter a tres hombres con un rol completamente defensivo, los tres puntos debían de quedarse en casa y así lo logró.

Foto: Udinese Calcio
Foto: Udinese Calcio