Estreno agridulce el que vivió el Granada Club de Fútbol en su vuelta a Segunda División tras seis años en la élite. El conjunto rojiblanco no pudo pasar del empate a cero ante el Albacete Balompié, al que acorraló en la segunda parte y en la cual la mala fortuna le impidió llevarse la victoria. El partido celebrado en Los Cármenes supuso algo más que un punto en la tabla clasificatoria y dejó un dato muy significativo del cambio de rumbo que ha tomado la entidad nazarí. José Luis Oltra presentó sobre el césped el 11 inicial más español que ha tenido el Granada desde 2011.

Entre los titulares que se vistieron de rojo y blanco en la noche del domingo en el Coliseo del Zaidín, nueve eran de nacionalidad española. Javi Varas formó bajo palos, Alex Martínez en el lateral izquierdo y Víctor Díaz en el derecho, Germán Martínez en el eje de la zaga, Raúl Baena y Ángel Montoro en el centro del campo, Pedro Sánchez como interior derecho y Joselu Moreno en la delantera. Además, el uruguayo Hernán Menosse hizo pareja con Germán en la defensa y el venezolano Darwin Machís en el extremo izquierdo.

Este hecho no ocurría en el equipo granadino, en competición oficial, desde el 4 de junio de 2011, coincidiendo con la última jornada de Liga en Segunda División, en encuentro disputado en el Estadio Colombino de Huelva. El Granada de Fabri llegaba ya clasificado para los play-off de ascenso a Primera, cuyo exitoso desenlace ya conocemos. Aquel día, ante el Recreativo de Huelva, el técnico gallego dio descanso a varios titulares y alineó un once con Roberto Fernández en portería, Siqueira y Rubén Párraga en los laterales, Íñigo López y Juande en la defensa, Óscar Pérez, Abel Gómez y Jonathan Granada en el medio centro, y Collantes, Carlos Calvo y Fabián Orellana en la delantera. Nueve españoles que llegaron a ser 10 con los cambios, ya que Fabri dio entrada a tres nacionales (Goku, Mikel Rico y Alex Cruz) para sustituir a dos que también lo son (Juande y Abel) y a un extranjero (Orellana).

El hecho de formar con un once tan ‘español’ tiene relevancia en el conjunto nazarí dada la globalización a la que se había acostumbrado la hinchada durante el periplo en Primera. El momento cumbre de la ‘Torre de Babel’ tuvo lugar en febrero pasado, cuando el Granada venció por cuatro goles a uno al Real Betis con 11 nacionalidades distintas formando de inicio: Guillermo Ochoa (México), Gastón Silva (Uruguay), Hongla (Camerún), Ingason (Islandia), Héctor Hernández (España), Foulquier (Francia), Wakaso (Ghana), Uche (Nigeria), Pereira (Brasil), Carcela (Marruecos) y Adrián Ramos (Colombia).