Es practicamente un hecho. El costaricense Joel Campbell vuelve al Real Betis en calidad de cedido, tal y como lo hizo en su primera etapa en el Benito Villamarín. Llega cedido por el Arsenal, quien ha puesto las facilidades necesarias para que esta operación se pudiera llevar a cabo.

Joel Campbell cumple ese rol que pedía Quique Setién hace unos días, un jugador de banda, con calidad y con la capacidad goleadora bien desarrollada. Con él, el Real Betis contará con cuatro extremos, Nahuel Leiva, Joaquín y Cristian Tello.

La llegada del aún jugador del Arsenal inglés inyecta aún más ilusión a la hinchada verdiblanca, que este año reboza de esperanza. Un gran trabajo, en particular de Serra Ferrer, trayendo a jugadores de un alto nivel que le van a permitir a Quique Setién desarrollar su juego. Con Joel Campbell, el Real Betis podría dar por finalizado este mercado, a no ser de una sorpresa de última hora. 

Aún está convaleciente de una lesión que sufrió al inicio de esta pretemporada del año dos mil diecisiete. Por ello, junto a Serra Ferrer, en la negociación estuvo presente el Jefe de los Servicios Médicos del Real Betis Balompié Tomás Calero para dar el visto bueno a los temas médicos.

Viejo conocido

Como hemos dicho, Joel Campbell jugará por segunda vez en su carrera en la entidad de las Trece Barras. La primera etapa fue bastante buena, siendo uno de los habituales en el Betis de Pepe Mel que logró clasificarse para competición europea, quedándo en liga en la séptima posición.

En ese Betis, el extremo costaricense participó con dos tantos en la competición liguera. Además, dio tres asistencias. La sensación de peligro cada vez que merodeaba el área fue en lo que más participó. Su desequilibrio y su habilidar para regatear levantaban al Villamarín en los encuentros en la Palmera.

De los buenos momentos que dejó en esta primera etapa vienen las buenas sensaciones que tienen los béticos en este momento, al enterarse de que el internacional costaricense volverá a vestir la elástica de las Trece Barras.

En la jornada de este jueves treinta y uno de agosto, llegaba al aeropuerto de San Pablo de la capital hispalense y un gran número de aficionados ya lo esperaban para darle la bienvenida de nuevo a la Ciudad del Guadalquivir.