Se agota el tiempo. El reloj de arena sigue vaciando granos en un fondo que está ya próximo a llenarse. Seis semanas, seis batallas, seis vidas para que suene la campana. Ya no sirven los lamentos ni el mirar atrás. Es el momento de matar o morir. Es el ahora o nunca para Granada Club de Fútbol y Sociedad Deportiva Huesca.

El Alcoraz será testigo en la tarde-noche del sábado de un duelo fratricida, el enésimo del curso, en la pelea por el ascenso. La diferencia es que los nazaríes han agotado ya todas las balas que le quedaban y disponen de una última para engancharse al carro del play-off. Puede ser un punto de no retorno o una vida nueva. 

Sin margen de error

Ni el mismísimo Stephen King hubiera podido escribir una novela tan terrorífica como la que se vivió el pasado domingo en el Estadio de Los Cármenes. Resurgía el Granada de su largo letargo en una buena segunda parte durante la cual doblegaba a la Cultural Leonesa por dos tantos de diferencia cuando, de repente, todo cambió. Una acción infantil, la enésima de la temporada en un jugador rojiblanco, costaba la expulsión a Víctor Díaz y, a raíz de eso, las huestes de Pedro Morilla desaparecieron del césped. Un inexplicable ataque de nervios que hizo flaquear piernas y cabeza a los jugadores allí presentes, que se refugiaron en su campo pero se entregaron al enemigo. Este perdonó un penalti cometido por Javi Varas lanzándolo a las nubes pero castigó después, en el tiempo de descuento. Donde más duele, los nazaríes encajaron dos goles y se marcharon con un empate y una sensación de abatimiento terrible. La grada ni les cuento.

Jugadores del Granada abatidos tras el empate ante la Cultural Leonesa. | Foto: Antonio L. Juárez

Este gigantesco desliz, sumado a los pertrechados con la derrota en Lorca y el empate en la Ciudad Deportiva del Sevilla Atlético, han dejado al Granada en la UVI deportiva. A tres puntos de los puestos de promoción de ascenso, con 18 en disputa, el margen de error se ha agotado. Salir de vacío de El Alcoraz, o incluso con un punto, podría suponer la herida de muerte. El calendario de teóricos asequibles ha quedado atrás y los monstruos de la competición (Huesca esta jornada, Rayo Vallecano la siguiente, y Sporting de Gijón y Cádiz en las dos últimas) aguardan en el horizonte. El más difícil todavía para un proyecto que navega rumbo al naufragio.

El sueño continúa

Entre el sobresaliente y la matrícula de honor. En esas franjas podríamos calificar la fabulosa temporada que está realizando la Sociedad Deportiva Huesca. Tras un sorpresivo play-off disputado la campaña pasada y en la que fue eliminado por el Getafe, el club oscense se marcaba como reto la salvación y volver a repetir gesta. Lo primero está ya conseguido, lo segundo casi, y lo inimaginable lo tienen al alcance de las manos. Y es que, a seis jornadas para el final del campeonato, ostentan la tercera posición empatados a puntos con el Sporting de Gijón que es segundo y que cierra los puestos de ascenso directo. Licencia para soñar.

Celebración de un tanto de la SD Huesca en El Alcoraz. | Foto: LaLiga

Y a este tramo final han llegado los azulgrana con opciones de promoción por la vía rápida gracias a su tenacidad. Lideraron la tabla durante buena parte de la temporada gracias a la maravillosa conexión entre Gonzalo Melero y Juan Camilo Hernández, el “Cucho”, y a un bloque que funcionaba a la perfección y practicaba un fútbol contundente en ataque. Sin embargo, una racha de ocho partidos sin ganar, con cuatro empates y otras tantas derrotas, los descabalgó de la cabeza y los sacó de las plazas de privilegio. Cuando parecía que el cuadro de Rubí no aguantaba, que se venía abajo, llegó la remontada ante el FC Barcelona B y, la semana pasada, la goleada al CD Tenerife. Seis de seis, confianza renovada y en Huesca que no rebla nadie.

¿La última bala de Morilla?

Rey Manaj y Menosse, novedades en la convocatoria rojiblancaFueron muchos los que pensaron que el actual entrenador nazarí, Pedro Morilla, no pasaría del empate cosechado ante el Sevilla Atlético. No menos los que creyeron que la debacle frente a la Cultural era la gota que colmaba el vaso. Pero no. Una semana más, la directiva del Granada ha depositado su confianza en un entrenador que genera dudas en la parroquia nazarí por los resultados, el juego y lo que transmite al exterior. No ganar en Huesca podría terminar de hundir a los rojiblancos en mitad de la tabla.

Para visitar a los altoaragoneses, Morilla tendrá dos nuevas bajas por sanción que son las de Víctor Díaz y Joselu. El primero, como ya comentamos antes, fue el que inició la tragedia griega del pasado domingo al inmolarse con una roja directa por dar una patada a un rival sin balón de por medio. El segundo vio la quinta amarilla por protestar la expulsión del primero. En teoría, Quini cubrirá la baja del lateral sevillano y Rey Manaj entra en la convocatoria en detrimento del delantero onubense. Además, Raúl Baena continúa recuperándose de lesión y tampoco estará disponible. La otra novedad en la convocatoria, la inclusión de Hernán Menosse. El central uruguayo llevaba mucho tiempo sin ser convocado y le gana el puesto a Germán como tercer central del equipo.

Pedro Morilla junto a su segundo, David Tenorio, en el banquillo de Los Cármenes. | Foto: Antonio L. Juárez

En rueda de prensa, Morilla siguió culpando a la “ansiedad y el miedo a ganar partidos” de la situación por la que atraviesa su equipo. También quiso destacar lo injusto de que “la actitud del equipo se viera reflejada en los últimos minutos”, ya que considera que debían de ir ganando “5-1 o 6-1” antes de la expulsión y que estas cosas pasan “una de cada mil veces”. Lo cierto es que el juego del Granada mejoró con la vuelta de Adrián Ramos y Darwin Machís pero el resultado volvió a ser el mismo.  

La lista de convocados la componen: Javi Varas, Rui Silva, Quini, Álex Martínez, Saunier, Chico Flores, Menosse, Montoro, Kunde, Alberto Martín, Espinosa, Sergio Peña, Agra, Pedro Sánchez, Darwin Machís, Puertas, Adrián Ramos, Rey Manaj.

Con toda la armada

Joan Francesc Ferrer, más conocido como 'Rubi', tiene motivos para sonreír. Tras superar un bache que casi da al traste con el sueño, el Huesca se ha levantado para reclamar el botín que, por persistencia, le corresponde durante toda la temporada: el ascenso. Las dos últimas victorias han llegado en abril pero como agua de mayo y, además, para el entrenador catalán, las buenas nuevas no vienen solas. Y es que ante el Granada podrá contar, después de mucho tiempo, con toda la plantilla a su disposición.

Chimy Ávila volverá a estar disponible para Rubi. | Foto: LaLiga

En la previa del encuentro, Rubi se mostró contento en cuanto a que su equipo "va a más" y optimista respecto al nivel en que acabarán la campaña. El recuperar a todos sus jugadores para la causa le supone un 'problema' porque "no hay once jugadores listos para las batallas, hay bastantes más". Del Granada quiso destacar que "no hay que infravalorarlo porque tiene mucho oficio y jugadores muy determinantes" y, en referencia a las cuentas por el ascenso, calcula que "quien gane cinco partidos o cuatro y un empate será el que se lo lleve".

Si bien la convocatoria de los azulgrana no se conocerá hasta el mismo día del encuentro, es de esperar el regreso del Chimy Ávila a la misma, que no estuvo en Tenerife por sanción. El extremo argentino es uno de los jugadores más en forma de la categoría y, salvo sorpresa, volverá al once para forma la tripleta atacante con David Ferreiro y el Cucho Hernández.

Posibles onces iniciales