El División de Honor del Sporting de Gijón saltaba a las 12:00 horas al césped de Zubieta con la única idea de conseguir el triunfo, o amarrar el resultado, para conseguir el billete que les daría el pase a los Cuartos de Final de la Copa del Rey de juveniles, aunque al final sería todo lo contraría, ya que perderían la eliminatoria. El resultado global era el que consiguieron los asturianos en la ida, siendo éste de 1-3. El encuentro comenzó con una posesión del Sporting en su campo tras la intensa presión de su rival, quien necesitaba un gol tempranero para meterse de lleno en el partido y en la eliminatoria. A medida que pasaban los minutos los locales se hicieron rápidamente con el completo dominio del balón en todo el terreno por el que pasaban.
El primer gol, para desgracia de los asturianos, llegaría en una peligrosa faltaba botada por López, cuyo disparo impactaría en el poste y sería Blasco quien estaría astuto a la hora de coger el rebote y no fallar tal clara ocasión de gol. No se recuperaron los jugadores rojiblancos y sería Elzagirre quien anotaría el segundo gol para hundir aún más moralmente al conjunto visitante y dejarle contra las cuerdas en un abrir y cerrar de ojos, sin tener apenas margen de mejora.
Hasta ese momento un gol de los asturianos les hacían pasar la eliminatoria y cambiar, completamente, los planes del conjunto local. Tal deseo no pasaría, pues en la segunda parte sería López, tras un tremendo disparo de falta directa, quien anotaría el tercer gol para los suyos, la sangría de goles se veía en el horizonte y venía, cada vez, a pasos agigantados. La suerte no estaría de su suerte, ya que sería Sandoval quien se lesionaría y debería de abandonar el terreno de juego en camilla, las malas noticias se hacían de esperar. Si el resultado ya era bastante abultado, sería Elzagirre quien volvería a anotar para cerrar, de manera definitiva, el marcador y dar la vuelta, de forma épica, a una eliminatoria en la que estaban en clara desventaja.