Se acaba una etapa. La temporada 2017/2018 llega a su fin tras estar marcada por la era José Alberto, una era de ensueño. A estas alturas, siempre es de sabios recapacitar en los errores cometidos y en tratar de mejorarlo, aunque eso no se deba de barajar ahora. Siempre se buscan jugadores para destacar sus virtudes, pero también para sacar a la luz sus defectos y corregirlos en el mejor de los casos.

El esquema de un equipo se debe de potenciar por el medio del campo y es por eso que la sala de máquinas es de las piezas más importantes de cualquier equipo, algo vital en el fútbol. Es por eso por lo que el Sporting de Gijón B tiene a uno de los mejores medios del campo de su grupo, el Grupo II, y, dentro de este medio del campo, tienen a unos jugadores que merecen todos los galardones que existan dentro del fútbol.

Es necesario, y obligatorio, hablar de cada uno de ellos. Tantos los titulares como los reservas meren ser mencionados y elogiados, ya que ambos consiguieron que nunca se notara la baja de un jugador, haciendo así importante a todos sus integrantes y no a un único jugador, algo que les permitió rendir al mismo nivel.

Cris Salvador, salto de calidad

8 | Polivalente. El jugador zamorano procedente del Zamora Club de Fútbol en el mercado estival de la pasada temporada recaló en el filial rojiblanco como jugador que ocuparía el rol de medio-centro, algo que demandada el Sporting B en la Tercera División de Asturias con el único objetivo de conseguir el ascenso a la Segunda División. El papel, que en un principio era únicamente de medio-centro, fue derivando, ésta presente temporada, a ser más defensivo que ofensivo, con lo que José Alberto ganaría un jugador reconvertido a central cuando el equipo estuviese volcado al ataque.

Nacho Méndez, la perla de Mareo

10 | Futura promesa. La perla de Mareo sigue maravillando con su fútbol tanto en el Sporting B como en el Sporting de Gijón. Su rol en el filial sportinguista es de ser la batuta que dirige el medio del campo en el plano ofensivo, algo en lo que realmente más destaca. Tras su debut en partido oficial con el Sporting de Gijón en liga, el de Luanco aportó paulatinamente pequeños gestos técnicos para poder dar el salto en cualquier momento. Futura promesa  del conjunto asturiano sin lugar a dudas.

Pedro Díaz, la timidez en estado puro

9 | Futuro talento. Más atacante que centrocampista, el jugador del Sporting B puso punto y final a una de sus mejores temporadas en el cuadro asturiano. Su conexión con Nacho Méndez en el medio del campo fue de las mejores de los participantes en el Grupo II, algo muy a destacar. Sus pases de calidad, su afán por elaborar jugadas y su participación en el ataque le hacen valedor de cualquier tipo de elogios.