SD Ponferradina y RC Celta B se daban cita en El Toralin, en el encuentro inaugural de la jornada 17 en el Grupo 1 de la Segunda Division B. Primero contra decimotercer clasificado. Bercianos y vigueses afrontaban este encuentro con el objetivo de lograr una nueva victoria para consolidar sus objetivos.
La Deportiva, llegaba a este partido tras encadenar dos triunfos consecutivos ante Valladolid B e Internacional de Madrid de forma autoritaria, recuperando su mejor versión que le permitía alcanzar de nuevo el liderato.
El equipo berciano quería cerrar este año 2018 en su estadio brindando una nueva victoria a su afición para mantener el liderato una jornada más antes de afrontar el último compromiso liguero del año en Fuenlabrada. Por su parte, el filial vigués, aterrizaba en El Toralin tras volver a la senda de la victoria ante el Fuenlabrada, más que necesaria para el Celta B que acumulaba diez jornadas sin conseguir los tres puntos, pero deben seguir sumando de tres en tres si quieren auparse a los puestos nobles de la clasificación.
Jon Pérez Bolo contaba con las únicas bajas de Gazzaniga y Jon García para este encuentro, más las ya sabidas de Yorgan y Edward Bolaños, que hasta Enero no estarán disponibles para el primer equipo. Por su parte, el técnico del Celta B, Rubén Albes tenía las baja de Robert Costa, pero sin embargo recuperaba a Apeh.
El técnico vasco apostaba por un 4-2-3-1 clásico sin ninguna novedad respecto al equipo que formaba la semana pasada y salía victorioso en Boadilla del Monte. Dani Pichín, esperaba su oportunidad desde el banquillo.
Reacción final tras un tibio inicio
Con una entrada cercana a los 4500 espectadores, en un día y horario poco habitual de futbol en Ponferrada, en una tarde lluviosa pero con el césped en sus mejores condiciones daba comienzo el encuentro entre Ponferradina y Celta B. Comenzaba el encuentro de forma equilibrada, con ambos equipos intentando hacerse con el dominio del partido.
El Celta B se hacía con el dominio de la posesión ante una Deportiva bien ordenada como es habitual, intentado hacer daño con la velocidad de su referencia, Dennis Eckert. La primera gran ocasión sería para el filial vigués a los trece minutos, en una falta lateral botada lateral en el que el remate de cabeza de Alende ante la mala salida de David Gómez se fue cerca del palo izquierdo.
El filial celeste traducía su dominio en gol con una jugada por banda izquierda que remataba Vega a placer en el área pequeña tras la indecisión en la zaga blanquiazul. El tanto del Celta B dejaba a la Ponfe algo alicaída ya que no encontrabas vías por donde hacer daño al conjunto celeste.
La primera gran ocasión para los blanquiazules llegaba en un libre directo lejano de Ríos Reina que conectaba un disparo potente a la escuadra que obligaba a Iván a hacer una gran intervención para evitar el tanto de los bercianos. Sería el preludio del empate.
A los 36 minutos en una falta lateral botada por Isi, en la que el guardameta visitante Iván no blocaba bien y Zabaco atento al error del guardameta marcaba a puerta vacía el tanto del empate para la Ponferradina. La Deportiva conseguía reaccionar antes del descanso.
Los últimos minutos de la primera mitad se volvieron algo broncos, con constantes faltas e interrupciones. El colegiado asturiano decretaba el final del primer acto con el mencionado 1-1 entre bercianos y vigueses.
La Deportiva nunca se rinde
Tras el paso por el túnel de vestuarios, Jon Pérez Bolo movía ficha dando entrada a Dani Pichín en lugar de un desapercibido Espina. Con este movimiento, Isi pasaba a banda derecha y Jorge García a la mediapunta.
Esta sustitución dio otro aire y energía a una Deportiva que comenzaba muy enchufada el segundo acto acogotando al Celta B en su área con numerosas llegadas en las que estuvo a punto de conseguir el segundo tanto en los diez primeros minutos.
Yuri, tuvo en sus botas una gran opción para poner adelante a la Deportiva en el marcador, pero no pudo culminar ante el meta Iván. Respondía tímidamente el Celta B con un disparo de Pastrana desde la frontal que atrapaba David Gómez sin dificultades.
Bolo, en busca del segundo tanto, introducía otro cambio ofensivo, dando entrada al delantero David Grande en lugar de Jorge García, que tampoco tuvo su mejor tarde. Sin embargo, se le volvía a torcer el panorama a la Ponfe, tras un error en la entrega de Trigueros, que acababa en penalti de Zabaco sobre un atacante celeste.
Alex Serrano fue el encargado de transformar la pena máxima engañando completamente a David Gómez. El Celta B volvía a recuperar el mando en el marcador falta de diecisiete minutos para la conclusión. Pero esta Ponferradina nunca se rinde.
A pesar de recibir el mazazo del segundo gol, se rehizo nuevamente e igualaba de nuevo el partido por medio de Yuri tras una jugada por banda izquierda con la asistencia de Ríos Reina.
En el minuto 81, tras un balón suelto en un córner, Sielva casi culmina la remontada de la Deportiva pero el portero visitante Iván, realizaba una intervención milagrosa para evitar el tercero. Los blanquiazules, espoleados por el aliento de la grada, buscaban con insistencia el tercero que también pudo llegar en un disparo de Son que se perdía cerca de la escuadra izquierda.
El Celta B tampoco se conformaba con el empate en la recta final con la Deportiva volcada, pero sin disparos ni oportunidades peligrosas. El colegiado asturiano decretaba finalmente el final del encuentro con el mencionado 2-2, en un partido vibrante y de alternativas el vivido en El Toralin. La Deportiva, que de nuevo dio muestras de su carácter de campeón, cerrará el año en Fuenlabrada mientras que el Celta B cerrará el año en Barreiro.