Menos de 24 horas para que el esférico vuelva a rodar sobre el verde de Atxabalpe en lo que se antoja como un encuentro vibrante entre las Sociedad Deportiva Eibar y el Club Deportivo Mirandés. Después de haber completado con éxito diferentes sesiones basadas en aspectos físicos y tácticos de cara al inicio de la nueva temporada, los integrantes de la primera plantilla armera y del escuadrón burgalés medirán fuerzas en el campo de entrenamiento de la entidad azulgrana. El choque comenzará a las 18:30 horas y no contará con aficionados en las gradas, tal y como apuntan las diferentes directrices llegadas desde las autoridades sanitarias del país. 

En la misma línea y buscando alcanzar la mejor versión en lo que a la etapa preparatoria se refiere, los integrantes del primer equipo de la SD Eibar se ejercitarán el mismo viernes a las 10:30 horas en Atxabalpe. Por consiguiente, Mendilibar dirigirá una nueva sesión, en este caso, previa al encuentro ante la escuadra rojilla, que visitará el habitual campo de entrenamiento del conjunto armero a las seis y media de la tarde. En ella, el histórico técnico del Club deberá valorar qué once inicial conformar, con qué jugadores y qué espera sacar en claro. 

Tal y como el propio escuadrón eibarrés señaló en su cuenta oficial d Twitter, el ejercicio colectivo de este jueves se redujo a trabajo individual, con y sin balón, además de a la ya habitual carga física, ingrediente indispensable en la pretemporada de equipos punteros del balompié nacional. Por último, se espera actividad y movimiento en los despachos de Ipurua, pues, atendiendo a la rumorología, la entidad vasca estaría a punto de cerrar dos fichajes para reforzar la parcela defensiva. Ambos llegarían para paliar las carencias de un equipo en el que ya no está Iván Ramis y en el que Cote se encuentra lesionado de gravedad.