El equipo de Pellegrini parece haber perdido su desparpajo, confianza y productividad de los primeros partidos de Liga y no encuentra el camino para reencontrarse y reconciliarse con su propio estilo. Por ese motivo, el entrenador contempla la posibilidad de introducir cambios relevantes de cara al partido del próximo.

Ya parecía estar sobre la mesa esa ‘revolución’ la pasada semana, pero lo cierto es que el equipo volvió a ser el de siempre, si hablamos de mentalidad, y casi el mismo si hablamos de nombres propios. Ingresó en el once titular Joel por la baja de Claudio Bravo. En el centro de la zaga volvió Marc Bartra para acompañar a Sidnei. Los laterales, un partido más, fueron para Álex Moreno y Emerson Royal, pese al bajo rendimiento del segundo en los últimos partidos y las carencias defensivas mostradas por el primero. Sí propició la novedad la reciente recuperación de Andrés Guardado de su lesión, que entró en el once pero acusó la falta de ritmo. Todo lo demás fue como siempre. Las bandas para Tello y Joaquín, que parecen cada vez menos inspirados. El portuense, además, cargó en sus piernas los noventa minutos del partido, evidenciando así la poca confianza de Manuel Pellegrini en el resto de nombres para ocupar esa posición. En la media punta volvió al verde Fekir, que pese a no estar a su mejor nivel parece indiscutible su titularidad en este Betis, y más, con la ausencia de Sergio Canales. En la punta de ataque volvió a ser Sanabria el ‘9’ elegido por el chileno, pese a los buenos minutos de Loren Morón en los partidos en los que ha podido intervenir.

La primera posibilidad que se le abre a Pellegrini es un cambio de sistema. En temporadas anteriores, el 5-4-1 o 5-3-2 han sido las únicas opciones que el equipo ha encontrado para corregir la inseguridad atrás y la sangría goleadora. Pero se resiste el 'Ingeniero' a esta posibilidad, y más, teniendo en cuenta que Aissa Mandi aún no podrá regresar con el grupo como estaba previsto, pues sigue sin dar negativo en Covid-19. Otra opción sería plantear un 4-4-2, con Loren Morón y Tony Sanabria juntos en ataque, y el marbellí bajando a la zona de creación para recibir de espaldas y generar espacios.

No obstante, todo apunta a un nuevo 4-2-3-1, y que los cambios irán enfocados a nombres propios y no a modificaciones en el dibujo. Los laterales se presentan como la posición más controvertida, dado el bajo rendimiento de los titulares. Cabe, incluso, la posibilidad de que Álex Moreno adelante su posición al extremo y por detrás juegue Miranda como lateral. Aunque eso supondría la suplencia de Cristian Tello, lo cual es poco probable dado que ha sido uno de los nombres propios del inicio liguero.

El centro del campo es toda una incógnita para el chileno. Parece indiscutible la titularidad de Guido Rodríguez, sin embargo, aún está por ver quien casa mejor con el argentino. Willian Carvalho parece más fuera que dentro del equipo y es un jugador muy irregular, nunca se sabe qué rendimiento va a dar en cada partido. Por eso es siempre de los únicos señalados por Pellegrini. Andrés Guardado, por edad y rendimiento, parece más destinado a ser un buen recambio que un nombre fijo en los onces iniciales si se quiere optar a zonas altas de la clasificación. Otra opción sería la entrada en el once del canterano Paul, que ya ha tenido minutos con Manuel Pellegrini y que es muy del gusto del chileno. O la de Rodri, para que haga de Sergio Canales mientras este esté ausente. Por delante, Nabil Fekir será a buen seguro el hombre encargado de generar las ocasiones y filtrar pases a sus compañeros, pese a que su rendimiento actual está muy alejado de su mejor versión.

En las bandas, Aitor Ruibal, que logró convencer a su técnico con  buenas actuaciones en pretemporada, podría contar con minutos. Diego Lainez, después de buenas intervenciones durante los minutos que ha podido entrar al verde, sería un jugador que aportaría desborde y recursos diferentes que permitan asociarse a los jugadores de arriba con mayor éxito. Por último, Loren Morón se postula como delantero titular, después de que Tony Sanabria haya reducido sus prestaciones en las últimas jornadas.